Un equipo de estudiantes y académicos de la carrera de Ingeniería Química de la Universidad Iberoamericana Puebla, desarrolla un proyecto para crear bioplásticos con almidón de arroz y papa.
En el trabajo participan los estudiantes Salma Ramón, Antonia Rodríguez y Héctor Albizua, con el apoyo del investigador, Óscar García, coordinador de Ingeniería Química de la institución. El objetivo del proyecto es aplicar los bioplásticos en el área de medicina y en el empaque de productos porque se trata de materiales que no son dañinos para el medio ambiente y su desintegración tardaría un reducido tiempo en comparación con los derivados del petróleo.
Para la obtención del bioplástico, se trabajó con los almidones del plátano, del arroz y de la papa. El proceso más complicado es el del plátano porque se pierde todo el fruto; mientras que en el caso del arroz y de la papa, solo se ocupa una parte y el resto puede destinarse para la preparación de alguna comida.
“La base de nuestro proyecto es la creación de un bioplástico a base de productos naturales y biodegradables. Nosotros encontramos que con almidón de diferentes elementos naturales, se pueden realizar bioplásticos. Nosotros hicimos las pruebas con almidón de plátano, arroz y papa. La obtención de almidón del plátano es difícil porque se tiene que ocupar todo el fruto para una masa. Decidimos utilizar arroz y papa porque se puede obtener el almidón y ocupar el resto para cocinar o hacer otros productos”, comentó Salma Ramón.
El almidón que se obtiene del arroz y de la papa, se mete al horno para luego hacer un polvo, el cual, se puede trabajar para realizar diferentes moldes de bioplásticos que se pueden ocupar en la industria de la medicina.
“Estamos en pruebas de resistencia al desgaste, al calor y el agua de los bioplásticos que se obtienen del arroz y de la papa. Encontramos que tiene una buena flexibilidad y puede ser utilizado para diferentes cápsulas de medicina. En la industria de la medicina, el bioplástico es ideal porque se puede disolver en el estómago de las personas. Se puede consumir sin mayores problemas para la persona”, comentó.
El investigador, Óscar García, explicó que en la industria de la medicina, los bioplásticos podrían reducir costos en más de 30 por ciento; además, en un futuro, el proyecto se podría aplicar en la creación de bolsas para desechos.
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