Guadalajara, Jal. Pese a que el temporal de lluvias inició tarde en Jalisco, el exceso de agua provocó la pérdida de 300 hectáreas de cultivo, principalmente maíz, en el municipio de La Barca, ubicado en la región Ciénega del estado, principal productora del grano en la entidad.
“Llegó con unas lluvias muy copiosas, a la fecha ahorita sí tenemos varias parcelas siniestradas, es un número considerable ya de hectáreas con pérdida en la siembra”, dijo el presidente municipal, Javier Arturo Franco.
“Nos prestaron una maquinaria por parte de la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder), donde estamos metiendo una excavadora oruga para limpiar unos drenes de escurrimientos pluviales que vienen desde la zona de Los Altos (…) el Río Lerma no lleva todavía un caudal, no es un riesgo ni un peligro, más bien son los drenes que no se desazolvaron por varios años”, agregó.
El municipio de La Barca produce 300,000 toneladas de maíz cada año. De acuerdo con la Seder, para la agroindustria de Jalisco tiene gran importancia el consumo tanto de maíz amarillo como blanco, por su producción interna y por la demanda de parte de productores de leche, carne y huevo, además de la industria almidonera.
Recupera seguridad
Pese a que en el municipio de La Barca llegaron a encenderse las señales de alerta hace unos meses por la presencia de grupos de la delincuencia organizada, debido a su cercanía con Michoacán, el presidente municipal afirmó que la situación está controlada, sobre todo por la presencia desde hace más de un año de elementos de la Fuerza Única Regional.
“En seguridad ahorita prácticamente estamos bien en el municipio, tenemos la presencia de la policía investigadora, la presencia de la Fuerza Única, el municipio está tranquilo, esta monitoreado, haciendo coalición con Seguridad Pública Municipal y tenemos lo normal, eventos normales, robos a casa habitación que son en la región algo que no podemos dejar de lado”, agregó el funcionario.
Señaló que el municipio y toda la región Ciénega retomaron la seguridad, luego que se instalaron de manera permanente elementos de la Fuerza Única Regional a 300 metros del Río Lerma, que es el límite con Michoacán.
El Economista
