Con la actual temporada de lluvias, los campesinos de Guadalupe Victoria esperan que la cosecha sea de muy buenos resultados, por lo que contemplan que les podría dar un rendimiento de hasta una tonelada de frijol por hectárea, esto de continuar las precipitaciones pluviales al ritmo que se ha observado en las semanas recientes.
Esta, por lo menos, es la apreciación de don Pablo Rodelo Tapia, quien desde más de 60 años se dedica a cultivar la variedad de Pinto Saltillo, aunque lo hizo primero en unas tierras propiedad de su abuelo.
Actualmente, dice con mucho orgullo, trabaja en una superficie que ya se puede considerar como suya .
Al preguntarle cuál es el rendimiento de frijol que se obtiene por hectárea en un mal ciclo, es decir cuando las lluvias no les favorecen, afirma que oscila entre 300 y 400 kilos.
Sin embargo, aclara que en su caso muy particular la cosecha que recoge de sus tierras la destina para el consumo de la familia; no obstante, también reconoce que en ocasiones vende “uno que otro costal” para solventar algunas necesidades personales.
En relación con los apoyos que recibe para cultivar su predio, señala que por parte del Gobierno Federal se le asignan recursos del programa Procampo.
Al relatar cómo trabaja en su parcela, don Pablo precisa que él solo se basta para las labores que hay que realizar diariamente pues añade que aunque tiene hijos ya no le pueden ayudar porque “ellos ya hicieron su vida aparte”, por lo que desde las 7:00 y hasta las 16:00 o 17:00 horas termina de efectuar las faenas agrícolas que puede ejecutar ya que, admite, a sus 74 años de edad ya no tiene el vigor de antaño, cuando era joven.
El Siglo de Durango
Comentarios
comentarios