Con el programa de Reconversión Productiva se busca reducir en un 17 por ciento el porcentaje de hectáreas que se siembra de frijol anualmente, para pasar de 240 mil a 200 mil.
Las autoridades de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural reconocieron que se está trabajando para “bajarle” un poco a la siembra del frijol.
Para ello se tiene previsto sembrar 30 mil toneladas de cebada, de las cuales de tres a cinco mil son por siembra de contrato que garantizan al productor que su cosecha ya está vendida, incluso, cuando apenas están sembrando.
En cuanto a maíz, se busca sembrar alrededor de 200 mil hectáreas de este grano, tanto blanco y amarillo, pero con la finalidad de bajarle un poco a la siembra de los primeros y destinar más tierras a la del maíz para forraje porque de esta se tiene asegurada su venta por contrato para la empresa SuKarne, que es la más interesada en comprar las cosechas que se generen de este cultivo.
Esta empresa busca comprar alrededor de 110 mil toneladas de este grano con un precio de 3.3 pesos por kilo, pero con la idea de que al final se paguen los 3.5 pesos por kilogramo.
La siembra de maíz amarillo se dará principalmente en Durango, Guadalupe Victoria, Nuevo Ideal, Vicente Guerrero, Poanas y Canatlán.
Se tiene un estimado de que este año se logren sembrar alrededor de 45 mil hectáreas del maíz amarillo que es destinado para alimento del ganado, y se prevén alrededor de 155 mil hectáreas sembradas de maíz blanco.
En suma, en todo el estado se tiene prevista una siembra de 643 mil hectáreas de diferentes cultivos siendo el frijol el que más volumen de hectáreas tiene, seguido por el maíz y luego los forrajes.
El Siglo de Durango
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