Durango.- Las nevadas y bajas temperaturas que generó la undécima tormenta invernal han dejado muchos beneficios en el sector rural, ya que humedece las tierras para la agricultura, mata las plagas, proporciona horas-frío para la fruticultura, disminuye la presencia de incendios y favorece la generación de pasto para el ganado.
Francisco Gamboa Barrón, secretario de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural del Estado (SAGDR), señaló que en lo que respecta a la fruticultura, sobre todo en la manzana, en la zona de Nuevo Ideal, Canatlán y la poca que existe en Pueblo Nuevo, las bajas temperaturas, aparte de combatir las plagas, contribuyen a completar las horas-frío que requieren los cultivos.
“Los cultivos y árboles frutales que son de este ciclo que se ven beneficiados son manzano, nogal, durazno, membrillo y chabacano, y aunque algunos estén en flor de todos modos es bueno el frío; solo el aire podría afectar un poco, pero no hay ningún reporte de daños”, dijo el funcionario.
De igual manera, los cultivos forrajeros, que son los del ciclo otoño-invierno, se benefician porque permiten ahorros en el riego y se recargan los mantos acuíferos.
En las parcelas donde todavía no se siembra, pero que ya fueron barbechadas, el beneficio es porque mata la larva de las plagas que se quedan resguardadas en la tierra en espera de la nueva cosecha, enfatizó.
CRECE EL PASTO PARA EL GANADO
En los pastizales y agostaderos se acelera el proceso de regeneración de pasto para alimento del ganado y se reabastecieron los abrevaderos para los mismos animales, explicó.
Al sector forestal esta nevada y aguanieves que cayeron en toda la Sierra resultan benéficas, primero, porque humedece la tierra y evita la propagación rápida de incendios. También beneficia porque con la nieve se permite una mayor filtración a los mantos acuíferos porque el agua no corre, sino que se filtra al subsuelo.
21 MIL HA. SEMBRADAS Y BENEFICIADAS
De superficie estatal se encuentran sembradas hasta la fecha 14 mil 531 hectáreas, sobre todo de cultivos otoño-invierno en la zona del Valle y los Llanos, mientras que en La Laguna son 11 mil 375 hectáreas con un total en la entidad de 25 mil 906 hectáreas, de las cuales la mayoría son de forrajes, 18 mil hectáreas (alrededor del 70 por ciento), que son las más beneficiadas.
El resto de las hectáreas tienen sembrados productos como avena, cebada, haba, maíz, trigo y hortalizas.
El Siglo de Durango
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