Alertan en Chihuahua por plaga de jabalí europeo

Las cosechas de productores pequeños en diez municipios de la entidad han sido arrasadas durante los últimos meses por la creciente reproducción del jabalí europeo, obligando a las autoridades mexicanas y estadounidenses a echar a andar un programa de control animal.

El ingeniero Luis Antonio Gamboa, jefe del Departamento de Vida Silvestre en la entidad, mencionó a Ojinaga, Manuel Benavides, Namiquipa, Riva Palacio, Julimes, Buenaventura, Chihuahua, entre otros, como los lugares donde la problemática de los productores es grave.

Manifestó que la migración del cerdo salvaje hacia México y provenientes de la Unión Americana, ha generado daños severos en el ecosistema de la entidad y sobre todo en los lugares donde la siembra es parte de la economía local.

Ante dicha situación y con el objetivo de evitar la alteración de la biodiversidad, las afectaciones de abundancia y composición de los ecosistemas, las autoridades de México y Estados Unidos trabajan en conjunto en el tema del control del jabalí europeo.

Y como parte de las tareas para el seguimiento del control de este mamífero, la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología (SDUE) de Chihuahua en coordinación con el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) llevaron a cabo una reunión de trabajo, en la cual acordaron talleres y formar un comité con el que se realizará un diagnóstico y estudio para dar seguimiento a las medidas necesarias de dicho control, que se efectuará con acciones en conjunto con autoridades federales, estatales y académicas.

Anotó que el jabalí europeo es un mamífero con una enorme área de distribución, es una especie muy prolífica originaria del continente euroasiático, que incluye hábitats muy diversos.
Señaló que ha tenido éxito en establecerse en todos los continentes donde ha sido introducido, y compiten directamente con el ganado doméstico al consumir la raíz de la vegetación destinada al pastoreo.

Refirió que los escarbaderos que realizan estos animales crean canales profundos y montículos que pueden dañar los implementos y maquinaria agrícola provocando heridas al ganado doméstico, además afectan directamente la composición vegetal del suelo, promoviendo el crecimiento de plantas indeseables, al destruir y consumir en su totalidad la mayoría de los pastos forrajeros deseables.

Crónica de Chihuahua

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