Más de 8 mil apicultores de Yucatán se enfrentan al fenómeno denominado “colapso de la colmena” que en sólo 6 meses ha generado pérdidas en la captación y exportación de la miel yucateca.
“El colapso de la colmena” es cuando las abejas abandonan las colmenas en busca de azúcar y proteínas. La población que queda no es suficiente para mantener a las crías y sobreviene la muerte.
La producción de miel hasta el 2013 en Yucatán era de 12 mil toneladas al año.
“Hemos dejado de captar un 50 por ciento de la producción”, dijo Miguel Lara, apícola maya de Yucatán.
“Está reducido aproximadamente a 6 mil 500 toneladas en cada ciclo apícola”, indicó Nelly Ortiz, coordinadora de la miel en Yucatán.
De acuerdo con científicos y autoridades, este fenómeno se debe a diversos factores como: ataques de agentes patógenos a las abejas, especies invasoras como el ácaro “varroa”, las sequías o fríos.
“Colapso de las abejas, esto es una problemática a nivel mundial que se ha suscitado por varias situaciones, una la presencia o el uso de agroquímicos”, señaló Nelly Ortiz, coordinadora de la miel en Yucatán.
Lucy tiene 100 colmenas, ya no produce miel como antes.
“30 kilos hace como 8 años o 9 años por colmena. Y hoy como 5 kilos, si es que llega a los 5 kilos de miel”, externó Lucy Mex, apicultora.
Hasta hace 10 años, México producía alrededor de 80 mil toneladas de miel al año, paulatinamente esa producción fue disminuyendo.
En 2015, se registró una producción de 58 mil toneladas de miel, 20 por ciento menos y México se colocó como el quinto productor mundial.
La apicultura beneficia a unas 42 mil familias en el país quienes trabajan en 1.9 millones de colmenas, principalmente en los estados de Oaxaca, Chiapas, Jalisco, Quintana Roo, Yucatán, Zacatecas, Campeche y Morelos.
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