Matamoros, Tamaulipas.- Porque el diferencial entre costos de inversión y precios en que se tasan las cosechas de maíz y sorgo es mucho en detrimento del productor, Jorge Luis López Martínez afirmó ayer que las perspectivas para el 2018 en el sector agrícola no son las ideales, y que se agravan con los insuficientes y tardados apoyos gubernamentales.
El presidente del Consejo Estatal Agropecuario de Tamaulipas asegura que una de las dificultades primarias a que se enfrentan los agricultores es que desde hace 4 ó 5 años, los costos de inversión en el campo se han elevado considerablemente, lo que contrasta negativamente con la baja en los precios en que se tasa la producción de granos.
El diferencial es muy alto, dijo, “y esto nos pone en una situación difícil en la que no vemos claramente una solución favorable a corto o mediano plazo, porque si bien es cierto, tenemos que el gobierno federal brinda apoyos económicos al sector, pero estos definitivamente son insuficientes y muy tardados”.
Prueba de esto, es que “aún nos deben apoyos del año pasado, para este, Aserca fijó un apoyo complementario que está llegando a cuenta gotas y que definitivamente se habrá de completar hasta el 2018”.
Esto es para el sorgo y maíz, y asegura que la diversificación de cultivos podría ser una buena opción que permita a los agricultores mejorar sus ingresos y que su actividad sea más rentable, pero que se debe tomar en cuenta factores como el de la falta de agua para la soya y que el trigo no se ha dado muy bien en la región, por lo que se tiene que pensar en otros que sean aptos para esta región.
Es por eso que López Martínez considera que las perspectivas para el 2018 en el renglón agrícola no son las mejores, “porque podemos decir que en cuanto a producción se lograrán los objetivos, pero esto no va al parejo con los costos de inversión y los bajos precios de los granos”.
El Mañana
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