La última etapa del proceso productivo del maíz es el almacenamiento y éste está siempre en peligro por las plagas.
Generalmente los campesinos tratan de vender de inmediato la cosecha, pero en el caso del maíz local xhuba huiini’ o zapalote chico, se está tratando de almacenarlo.
Luego de iniciar un proyecto de tres años para mejorar la semilla y combatir las plagas del cultivo de forma natural, finalmente los campesinos están en la tercera fase que es la del almacenamiento, tanto para la venta como para el autoconsumo y la elaboración de los variados productos del maíz zapalote chico.
Este lunes 14 de mayo se instalará un módulo post cosecha que se construirá a través de acompañamiento técnico del programa Proagro, a través de técnicos del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT).
Ésta será una demostración “para que campesinos, productores agropecuarios, las mujeres que transforman el producto, estudiantes, organizaciones sociales, acudan y vean que los propios campesinos ya están haciendo este trabajo”, informó Tomás Chiñas Santiago, del grupo Tona Taati’.
El corolario de este proceso fue una iniciativa de los propios campesinos. “Hay que destacarlo, es un proyecto que surgió a iniciativa de los campesinos, el de rescatar el maíz zapalote, preservarlo, difundir su uso y su aprovechamiento; ha sido un éxito; llevamos más de tres años”.
La demostración se hará a las 9 de la mañana en el rancho San Antonio, ubicado a la altura del kilómetro 1.5 de la carretera a la agencia Álvaro Obregón.
