Los cambios climatológicos y las plagas del durazno han perjudicado 40 por ciento de las 700 hectáreas en las que se cultiva en el municipio, es decir más de 280, en perjuicio de 300 productores.
Por cada hectárea se invierten 7 mil pesos, aproximadamente, por lo que los fresnillenses que se dedican a producir este fruto tuvieron pérdidas que rebasan un millón 960 mil pesos, reveló Héctor González, uno de los principales durazneros del municipio.
Especificó que los agricultores esperaban obtener buenas ganancias económicas en este año; sin embargo, lamentó que algunos de ellos ya no podrán recuperar el dinero que invirtieron.
Ante estas pérdidas, los productores se verán obligados a incrementar el precio de este producto; sin embargo, aún no se define cuánto; el año anterior ofertaban la caja con 20 kilogramos a 200 pesos, es decir 10 pesos los mil gramos.
Prefieren no subir el costo, pero de no hacerlo las pérdidas económicos serán mayores, pues no recuperarán “nada de lo que invirtieron”.
Sin embargo, esperan que las ventas sean buenas y que el subir el precio no sea un factor que perjudique en la comercialización, ya que adquieren el durazno del municipio no sólo comerciantes del estado, sino también de Puebla, Michoacán y el Distrito Federal.
En comparación con el año anterior, el número de hectáreas perjudicadas por los cambios climatológicos aumentó, pues en 2013 se afectaron sólo 120.
Por cada hectárea se obtienen 6 toneladas aproximadamente de durazno tipo criollo, principal especie que se cultiva en el municipio.
Las zonas más afectadas por esta situación son las ubicadas en las comunidades San José de Guadalupe, El Triunfo, Purísima del Maguey, El Salto, San Jerónimo, Órganos y Colonia Modelo.
NTR
