La falta de agave limita el proceso de comercialización del mezcal jiquilpense en Europa, señaló Arturo Valdovinos, productor de mezcal en esta parte del estado.
“Todo está bien, el problema ahorita es que el agave ya se terminó porque no hubo renuevo de siembras”, y señaló que en la región se pueden ver plantaciones de agave pero se trata del “tequilero” o Tequilana weber, en tanto que para la producción de mezcal se requiere de agave americano, manso o silvestre.
Ante esto, dijo, los proyectos que se plantean tienen más que ver con la instalación de viveros o de mecanismos que garanticen la materia prima y no tanto en el tema de la comercialización, bajo el entendido de que sería ocioso generar un mercado externo si no se cuenta con la materia prima para una producción constante.
Destacó el entrevistado que para la producción de mezcal en la región de Jiquilpan puede utilizarse cualquier tipo de agave, a excepción del Tequilana weber, ya que éste se encuentra fuera de la norma del mezcal, toda vez que este municipio encuentra con las dos denominaciones de Origen, la del mezcal y la del tequila.
Es de destacar que según el entrevistado, la producción promedio de cada vinata es de mil litros por mes, producción limitada a propósito debido a la baja en las ventas y a la posibilidad de que se terminen los agaves utilizados.
“No hay plantíos grandes pero sí hay buscándole”, explicó, y dijo que no hay agave para emprender un proceso de industrialización a gran escala pero las existencias en los campos sí permiten mantener la producción en la vertiente artesanal.
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