Apicultores preocupados por uso de insecticidas

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El año de recuperación para los apicultores se encuentra en riesgo ante la aparición del pulgón amarillo en el cultivo de sorgo y las estrategias que implementan para su combate.

Después de realizar diferentes actividades así como gestiones de recursos y materia prima con los gobiernos Federal y Estatal, apicultores contemplan este 2017 como un año clave para recuperar las pérdidas del 70% de las colmenas a finales del 2015 y principios del 2016.

Francisco Salazar Talavera, presidente del Sistema Producto Apícola, mencionó que la principal preocupación se debe a que resultados de estudios que les presentaron investigadores del área de Biología de la UAAAN Unidad Laguna, arrojó que fueron los insecticidas de la familia de los neonicotinoides, lo que ocasionó la desaparición de las abejas.

En el 2015 la plaga del pulgón amarillo llegó a la Región Lagunera y afectó cientos de hectáreas de sorgo forrajero, para su combate los químicos que se aplicaron fueron neonicotinoides.

Este año, nuevamente los productores apícolas observan un escenario incierto y preocupante, que puede retroceder los avances que tenían.

Para Salazar Talavera, la alternativa que tienen es retirar los apiarios de las áreas agrícolas en donde se aplicará la fumigación, sin embargo, no ha tenido comunicación con las Juntas Locales de Sanidad Vegetal, así como con los productores que llevarán a cabo las fumigaciones para que de manera coordinada colaboren y permitan reaccionar a tiempo y reubicar los apiarios.

José Berlanga, apicultor, resaltó que a nivel mundial se han elaborado investigaciones que responsabilizan a los neonicotinoides de la desaparición de las abejas, mientras que a nivel local la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) delegación Región Laguna, no reconoce a este químico como un factor de acuerdo a las investigaciones que mandaron a realizar.

Ante lo cual pidió a la Sagarpa que muestre esas investigaciones y dé a conocer los resultados obtenidos.

Por el momento, apicultores de La Laguna de Durango recibieron el pasado viernes 7 toneladas de fructosa y azúcar para alimentar a las abejas esto debido a la falta de néctar en la flora que es otro factor que afecta a la producción apícola regional.

Milenio

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