Mexicali, BC. Durante el 2017 en el valle de Mexicali se cosecharon cultivos con una superficie de 70,479 hectáreas que generaron 404,956 toneladas, colocando a la entidad en el segundo lugar a nivel nacional.
La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) informó que durante el 2017 el estado también alcanzó el segundo lugar en la producción del algodón con 150,647 toneladas en 26,774 hectáreas.
En el caso del cultivo de alfalfa, durante el año pasado se produjeron 490,862 toneladas; el dátil, poco más de 4,000 toneladas representando el segundo del país; en la zona costa se producen frutillas como la fresa, con un volumen de producción de 91,659 toneladas, y el grupo de las berries, con 16,282 toneladas, colocándose en el segundo y tercer lugar, respectivamente.
El delegado de Sagarpa en Baja California, Guillermo Aldrete Haas, dijo que en el caso del trigo, durante la temporada fueron sembradas 15,599 hectáreas, con 7,918 hectáreas de planta nacida.
“En materia de trigo no le fue muy bien al campo del valle de Mexicali. Hubo una baja en la producción, debido principalmente a las condiciones meteorológicas y también nos pegaron los bajos costos internacionales”, mencionó.
Explicó que debido a la reducción en la producción, también habrá un recorte en los programas de apoyo a esta industria, lo cual se traduce en unas 15,000 hectáreas, para las cuales se espera crear mejores alternativas que permitan incrementar su productividad.
Otro de los problemas que destacó el funcionario estatal es la falta de agua en los cultivos, pero para ello dijo que el estado junto con el resto de los entes de gobierno ha creado un proyecto de abastecimiento a través del desarrollo de infraestructura que permitirá la distribución del líquido.
“Se ha trabajado de la mano con los módulos de riego, entablando conversaciones con los productores, además de reforzar la coordinación interinstitucional entre la Comisión Nacional del Agua y el Distrito de Riego, para observar y supervisar que se siembre lo que se pueda regar, que no se siembre más de lo que no tenemos capacidad para regar”, advirtió.
Lo anterior es una de las alternativas planteadas para reforzar las producciones de cultivo y que los productores que dejan de sembrar trigo tengan otras opciones, además del algodón.
El Economista
