Q. Roo.- Aunque ya no representa tanto negocio el cultivo de la caña, continúa siendo uno de los productos más rentables y de los más importantes en la zona sur de Quintana Roo.
Sin embargo, el negocio depende mucho de la oferta y la demanda que tenga el dulce, señaló Aarón Renteral Campos, presidente de la Unión de Productores de Caña de la CNC.
“La caña de azúcar es un gran negocio, no como antes, pero sí sigue siendo uno de los mejores productos del campo, este año se espera superar los 820 por tonelada alcanzados la zafra pasada”, insistió.
“La caña de azúcar es un gran negocio, no como antes, pero sí sigue siendo uno de los mejores productos del campo”
Descartó que sea uno de los cultivos que más “cansa” la tierra, pues lo que ocurre es que en el caso de la zona sur, luego de 40 años de sembrar la caña, sí se llega a afectar un poco la productividad de los predios si no se les da el mantenimiento adecuado, por lo que es importante fertilizarlos y atenderlos.
Mencionó que con el adecuado tratamiento, una hectárea puede dar un rendimiento de más de 120 toneladas de caña, lo cual es una buena cantidad que permite al productor sostenerse y volver a sembrar.
Respecto a la colocación de la caña de azúcar para su molienda, indicó que debido a la competencia que hay entre los mismos productores por tener cada vez mayor rendimiento, las condiciones son mejores, y aunque algunos siguen manteniendo algunos adeudos ya no es tanta la problemática como antes.
En comparación, expuso, el cultivo del maíz, chile y frijol sí cansa más la tierra, por lo que los productores de éstos no compran los terrenos, los rentan para sembrar un par de veces y luego se van a buscar otros.
El líder cañero, explicó que esto se debe a que para estos cultivos se ocupan muchos químicos y pesticidas para combatir las plagas, lo que afecta los predios, a los cuales debe dejarse descansar antes de volver a ocuparlos en la siembra.
Según datos del Comité de Producción y Calidad Cañera se tiene un precio base por tonelada de caña de alrededor de 790 para las liquidaciones finales en el mes de agosto; sin embargo se deja un margen y se podría alcanzar un remanente en el mes de diciembre, que el año pasado fue de 80 pesos más por tonelada.
SIPSE