Solo el 30 por ciento de la fresa cultivada en esta región vállense se comercializa en el país, a través de conservas, mermeladas, licor de fresa, entre otros productos y el 70 por ciento de la producción global es enviada y comercializada en diferentes países, especialmente en los Estados Unidos.
Según cálculos de los mismos productores regionales, este año en el Estado de Michoacán se establecieron un promedio de 4 mil 800 hectáreas, mientras que en el valle zamorano y zonas productoras de la región se plantaron 4 mil 100.
Los municipios en donde se estableció este cultivo son: Zamora, Jacona, Tangancícuaro, Ixtlán, Chavinda, básicamente, en donde en este momento se está generando una considerable demanda de mano de obra para el corte y transporte.
Por cada hectárea se generan unos 750 jornales, lo que deja en claro que la fresa es de los principales cultivos que demandan mucha mano de obra en el sector agropecuario en el Estado de Michoacán.
La fragaria oro rojo sigue constituyendo el motor del desarrollo agrícola y económico en el valle, pues además de ser una de las principales fuentes de empleo en el agro, también representa un apoyo considerable en la economía de esta zona productora.
Los productores dijeron que hay buenas expectativas porque este año sea mucho mejor que el anterior, en donde se espera que no se presenten climas que vengan a afectar la fresa, ya que de ser así se estaría ocasionando un fuerte golpe a la economía de quienes se dedican a esta actividad.
Al referirse a la tecnificación, informaron que hasta el momento un promedio de 3 mil 500 hectáreas ya cuentan con sistemas de acolchado y macrotúnel, con lo que se viene a proteger el cultivo contra fenómenos naturales como son tormentas, vientos huracanados, inundaciones, así como otros más.
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