Flores en color naranja, amarillo y púrpura adornan los extensos campos que pueden apreciarse al transitar por el bulevar Juan Pablo II y la carretera Tabalaopa, las flores blancas aún no se abren pero los cultivadores esperan que en dos semanas estén listas para cortar para el Día de Muertos.
A 18 días de celebrar el día de finados, varios cultivadores de flores se preparan para el corte y venta del producto de sus cultivos, muchos ya tienen tratos con algunas florerías, otros con vendedores independientes que buscan un mejor precio.
El color naranja y amarillo del cempasúchil resalta entre las matas de crisantemos que aún están por abrirse, mientras que las flores llamadas mota de obispo ya resaltan con su color púrpura. En el campo que se ubica a un costado del bulevar Juan Pablo II y casi Fuerza Aérea, la elegante flor se alza imponente, flores serán cortadas para la celebración del Día de Muertos para adornar las tumbas de los camposantos.
Estos cultivos son dignos de admirarse, pues en ellos está impreso el esfuerzo de manos chihuahuenses que de manera tradicional luchan porque esta tradición no se pierda. El constante cambio de clima ha hecho que los crisantemos aún no terminen de abrir, pero los cultivadores afirman que estarán listas para finales de este mes.
A algunas flores sólo le faltan unos días para abrir por completo, por lo que los compradores llegan hasta el predio para revisar la calidad y se van muy complacidos. Situación que hace que en los cultivadores crezca la esperanza de una buena ganancia.
En esta temporada las flores que la gente más busca sin duda alguna es el cempasúchil, con la que no sólo decoran las tumbas y disfrutan de su delicioso olor, sino que también utilizan para adornar los altares de muertos y así indicar el camino a las almas.
Otra de las flores que más se venden son los crisantemos, así como las motas de obispo, que con esa textura y color, como de terciopelo morado oscuro llaman la atención de cualquiera.
APRENDIÓ DE SU PADRE Y ABUELO
Cultiva flores Don Manuel desde los siete años de edad
> Ha sido maestro de varias generaciones y ahora su hijo también sigue esa tradición
Desde los 7 años de edad, don Manuel aprendió a cultivar flores, oficio que aprendió de su abuelo y su padre en la zona de Nombre de Dios: en dos meses cumplirá 70 años y su amor por la tierra traspasa a las fl ores que ahora cultiva en la zona de la Concordia y Tabalaopa, junto con su hijo Rafael, quien ha heredado el gusto por esta actividad.
En sus campos pueden apreciarse grandes flores de cempasúchil que ya casi están listas para ser cortadas, pues la semana que entra empezará la vendimia para los altares de muertos; afirma que desde hace un año el ramo lo vende en 10 pesos, pero en esta ocasión los venderá a 15, ya que cultivar las flores implica un gran trabajo.
Desde hace 50 años, Manuel Callejas Sebrero, mejor conocido como “Güero”, cultiva en esta zona, se le puede considerar el maestro de varios de los cultivadores, pues iniciaron ayudándolo y ahora ya cuentan con algunos surcos.
Don Manuel llega desde antes de las 6:00 horas para regar y estar atento de sus flores, relata que este año sembró 40 surcos de Mota de Obispo, 12 surcos de cempasúchil y 28 de crisantemo, de la venta de ellos obtendrá los recursos para vivir y seguir invirtiendo para el próximo cultivo, ya que además siembra algunas hortalizas como cebolla, cilantro y rábano.
Explicó que la Mota de Obispo la sembró en el mes de julio, el cempoal a finales de julio primeros de agosto y el crisantemo desde el mes de marzo, este es el cultivo que requiere más trabajo ya que se invierten 8 meses de cuidado para quitarle la plaga y fertilizarlo.
A la fecha sus flores ya están apartadas para los comerciantes del panteón, así como clientes que desde hace muchos años lo han seguido y le son fi eles. Los compradores le apartan los surcos con una cantidad y cuando van a cortar la flor liquidan el pedido, sin embargo, las heladas o las lluvias atemporales pueden terminar con el cultivo y por ende con la ganancia del trabajo de meses.
Parte del cultivo de Rafael se echó a perder debido a las lluvias intensas que azotaron a la ciudad, sobre todo porque el agua se quedó encharcada y no dejó que las plantas se desarrollaran. El cempasúchil ya está listo para cortarse, sobre todo porque esta flor es la más pedida con anticipación para la colocación de los tradicionales altares de muertos que muchas escuelas montan para rendirle homenaje a un ser querido.
Relata que antes cultivar flores era muy redituable, sembraban menos y ganaban más, por lo que ahora tuvo que diversificar su producción y cosecha algunas hortalizas que lo hacen fuerte hasta que vende la flor.
Al levantar las flores, don Manuel preparará la tierra para sembrar las flores para el mes de mayo, mientras tanto en cada recorrido que da por los surcos para revisar que estén bien sus flores disfruta de la naturaleza y los visitantes que llegan a merodear como son las abejas y las mariposas.
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