Este fue un año complicado para el sector agrícola de la Comarca Lagunera, con la llegada de fríos tardíos a principios de 2014 y las lluvias registradas que afectaron las cosechas de alfalfa, melón, sandía y algodón.
Esto derivó en una disminución en la producción y caída de precios, trayendo como consecuencia que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA), emitieran la declaratoria de “zona de desastre” para el campo lagunero de Coahuila y Durango.
Se reconoció que la declaratoria se logró por medio de la Cámara Agrícola y Ganadera de Torreón, el Consejo Regional Agropecuario y la Unión Ganadera, quienes unieron fuerzas para impulsar la iniciativa por medio de FIRA, Conagua y el gobierno de Gómez Palacio.
En su momento, se insistió en que en esta acción tuvo que haber intervenido la Dirección de Fomento Agropecuario de Torreón, así como Protección Civil, hecho que nunca pasó.
En el balance realizado por la Cámara Agrícola y Ganadera de Torreón, encabezada por Ignacio Jáuregui Urrutia, se detalló que la humedad representó para los productores agrícolas un grave problema debido a las plagas.
Los agricultores vieron, por ejemplo, como la mosquita blanca se presentó en la producción de melón, siendo afectada casi en su totalidad la cosecha, lo que representó la pérdida de la misma.
Otros cultivos fueron afectados, como el algodón, alfalfa y sorgo forrajero, provocando una caída en los niveles de cosechas, presentando números menores a lo programado dentro del ciclo agrícola.
Esto obligó a realizar diversas acciones como la defoliación anticipada en el cultivo del algodón con la finalidad de no atraer más plaga. Debido a ello se perdió 30 por ciento de la cosecha.
Y si bien durante el 2014 la Conagua entregó en tiempo el agua para el riego de los cultivos, se presentaron problemas dentro de la administración de los módulos de riego, como el desvío de agua.
Por otra parte, algunos cultivos arrojaron buenas cosechas, como fue el caso de la primera de sorgo y maíz, provocando un exceso de producción y una caída de 30 por ciento en el precio de los granos debido a la sobreoferta. Por factores externos, el costo del algodón tuvo una caída: paso de 80 centavos de dólar la libra a 60 centavos.
Los productores de la segunda cosecha de sorgo no lograron tener precio, el cual se ubicó por debajo del costo de producción debido a la sobreoferta. Por ello 2014 fue un año regular para el sector pecuario, productores que tuvieron que cumplir con regulaciones y exigencias del mercado.
Dentro de las peticiones que los productores agropecuarios realizaron al gobierno federal para 2015 se encuentran el establecimiento de precios objetivos en granos, como el maíz y sorgo.
“La Cámara Agrícola y Ganadera de Torreón gestionó un permiso de siembra obligatorio para todos los productores, con el fin de planificar la producción por ciclos y por tipo de cultivos por año, el cual ya fue autorizado por la La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), a implantarse en el 2015”.
De igual manera, se solicitó sea pública la planeación de los cultivos, lo que permitirá un control fitosanitario más eficiente y control en las cosechas, indicó Jáuregui Urrutia.
Los agricultores vieron, por ejemplo, como la mosquita blanca se presentó en la producción de melón, siendo afectada casi en su totalidad la cosecha, lo que representó la pérdida de la misma.
Otra de las solicitudes que el gremio realizará ante el Estado, es que se trabaje en materia de tarifas eléctricas para el sector agropecuario ante la Comisión Federal de Electricidad, así como en el rubro de seguridad, dar seguimiento a los rondines en ranchos para evitar los robos de maquinaria y equipo, además de asaltos a empleados.
En las complicaciones que vivió el campo lagunero intervinieron además variables macroeconómicas, como lo fue el alza en el precio del dólar, que luego de la celebración de la Navidad 2014 se ubicó en 14.69 pesos, de acuerdo con el Banco de México.
Los representantes de la Cámara Agrícola señalaron que este comportamiento que presentó el precio del dólar en los últimos meses del año, hizo “pedazos” la utilidad del campo, pues se reconoció que gran parte de los insumos como fertilizantes, equipo y maquinaria representan un gasto importante para los productores que deben destinar una cantidad importante de recursos para su importación, por lo que una paridad del precio del dólar menor a los 14 pesos, era lo adecuado para el sector.
Milenio