Mientras que la mayoría de las personas aclamaba que lloviera por el intenso calor que se siente en Rosario, una minoría rezaba para que se retrasaran una semana más.
Se trata de los productores de ciruela, ya que señalan que a partir del 15 de junio, desde Las Habitas a Matatán y la sierra, las lluvias han sido a diario, y es precisamente en ese rumbo donde se concentran los huertos de esta fruta.
Moisés Rivera Juárez, vecino de Matatán que tiene 40 años atendiendo un ciruelar, y el productor Julio César Valenzuela, coinciden en que la producción desde un principio se visualizaba mala, por la caída de la flor y por lo tanto el retraso del producto, además de que algunos árboles viejos ya no alcanzaron a florear.
Aunque esto generó pérdidas, aseguran que sorprendentemente el fruto casi se repuso.
Pérdidas. No obstante, lo que sí los acabo de dañar fueron las lluvias desde mediados de este mes, pues la mayoría de los productores tenían la ciruela tendida y se acedó, pues para secarse se necesita sol y aire.
Rivera Juárez agregó que fue en total lo equivalente a una semana de producción lo que se perdió debido al tiempo lluvioso, por lo que si algún productor sacaba 6 toneladas, lo más que lograrán son poco más de dos.
El precio de la tonelada de ciruela anda en el mismo precio que años pasados, de 13 a 15 pesos por kilo, por lo que si un productor sacaba alrededor de 90 mil pesos si levantaba 6 toneladas, ahora tan solo serán 30 mil pesos.
Sin embargo, de estos 30 mil pesos se tiene que pagar gente, comprar el cazo y la sal, y la recolección de la ciruela (la cubeta está de 10 a 15 pesos) según lo retirado de la huerta con la sindicatura.
Según los productores, en las dos toneladas se gasta un promedio de 22 mil pesos, quedándoles solo 8 mil pesos de ganancia.
Por ello, piden que los apoyos no sean destinados solo a quienes siembran mango, pues ellos también generan fuentes de empleos para su comunidad en la temporada de este fruto.
El Debate
