JUCHITÁN, OAXACA.- Los campesinos de la región tuvieron un mal año a consecuencia del clima, las plagas y la falta de agua, por lo que muchos perdieron más de la mitad de sus cosechas, opinó Guillermo Ramírez Matus, presidente del grupo agrícola Xhuna Binii.
El productor señaló que en el ciclo agrícola actual, Otoño-Invierno, las cosechas de maíz, principalmente, fueron atacadas por rachas de viento de hasta 150 kilómetros por hora, además de prolongados episodios de frío y viento, que derribó y quemó parcelas enteras.
“Algunos campesinos no lograron sus cosechas, porque los vientos las derribaron, además de que el frío los quemó, porque a pesar de soportar el calor de la zona, estos cambios de temperatura, sobre todo el frío, sí les afectó. No sólo el maíz, también el frijol, sorgo, sandía y otros productos”, comentó el campesino.
Además del mal tiempo, también les afectaron las plagas, en el caso del maíz se detectaron cinco tipos de gusanos; gallina ciega (bacha’na’), gusano de alambre, diabrótica, gusano trozador y gusano cogollero, más uno que no lograron identificar.
La falta de agua, en las tierras de riego, también fue un gran factor para el tardío desarrollo de la producción. De acuerdo a lo documentado, la falta de agua de la Presa “Benito Juárez” de Jalapa del Marqués para abastecer el Sistema de Riego número 19 dificultó el abastecimiento.
Aunque la escasez de lluvia en la zona también afectó la tierras de humedad, las que no utilizan el sistema de riego de los canales, sino que con tan solo el agua de lluvia acumulada en la tierra ayuda a la producción.
La organización que representa Ramírez Matus sembró alrededor de 10 hectáreas maíz, pero debido el mal tiempo, las plagas y la falta de agua, retrasó el desarrollo y fue disperso la madurez del producto, logrando cosechar la mitad de lo sembrado.
“A pesar de que es un proyecto agrícola de rendimiento con paquetes tecnológicos y asesoría técnica, el maíz zapalote chico logró sobrevivir las malas condiciones y se logrará cosechar la mitad de los sembrado, porque es un buen maíz, pero no muchos tuvieron nuestra suerte, desafortunadamente”, explicó el campesino de Juchitán.
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