Aún a contracorriente, las mujeres han ido ganando espacios en prácticamente todas las actividades económicas que se desarrollan en el país. La ganadería no es la excepción y, aunque son pocas, ya se percibe la presencia femenina en esta actividad que anteriormente era reservada para los hombres.
A decir de la gerente de la Asociación Mexicana de Criadores de ganado Limousin, Mercedes Mayorga Perea, las mujeres incursionaron en la ganadería más por necesidad que por gusto, pero poco a poco han ido ganando terreno en una actividad que las ha sabido conquistar y en la que inclusive, han aportado sus propuestas.
Refirió que la presidenta de la asociación es mujer (Patricia Adame Jenkins), lo que refleja una importante apertura en este sector a la equidad de género.
Se cuenta en la actualidad con 100 agremiados en total, de los cuales 20 son duranguenses. Del total de socios, únicamente están inscritas cuatro mujeres, las cuales son originarias de Durango.
A decir de la entrevistada con el trabajo se ha logrado vencer las barreras que anteriormente se presentaban en esta actividad y se ha demostrado que las mujeres tienen la misma capacidad para incursionar en este o cualquier sector.
Comentó que en la asociación más del 90 por ciento son hombres, pero las mujeres están a la cabeza y coordinan las labores con meticulosidad. “Claro que hay resistencia y machismo pero en el trabajo se tiene el mejor respaldo para defendernos”, manifestó.
La mayoría de las mujeres que están en la ganadería son jefas de familia e incursionaron por motivos como la migración de sus familiares (padres, esposos o hermanos). Muchas de ellas se vieron orilladas a realizar esta actividad por la necesidad de sacar a sus hijos.
Ante ello, exhortó a las mujeres que estén pensando en incursionar en la ganadería a que no lo duden, ya que es posible que puedan hacer prosperar empresas de ese tipo. “Si lo podemos lograr con la familia, también con cualquier otra actividad”, enfatizó la entrevistada.
El Siglo de Durango
