En Zacatecas se establecerá un esquema de comercialización del frijol para la cosecha primavera-verano 2016, junto con Durango y Chihuahua, estados que aportan el 70 por ciento de la producción.
El esquema de comercialización apoyará a frijoleros de las tres entidades, se informó en comunicado de prensa enviado por la Secretaría del Campo (Secampo), en el que se da cuenta de los acuerdos obtenidos durante varias reuniones entre productores y autoridades federales y estatales.
Se indica que los representantes de las 30 organizaciones acopiadoras manifestaron su compromiso de apoyar a los productores y establecieron el consenso salir con un precio de 10 mil quinientos pesos por tonelada para frijol negro y de 11 mil pesos para frijol pinto.
Los propios acopiadores expresaron que la relación oferta-demanda, en el caso de las variedades flor de mayo y junio son adquiridos en el mercado libre de 12 mil a 12 mil 500 pesos por tonelada, cifra superior a los precios de 2015.
El documento oficial señala que las autoridades del ámbito agropecuario lograron el apoyo para 151 mil toneladas de la leguminosa, por 600 pesos por tonelada, pese al ajuste anunciado en el Presupuesto de Egresos de la Federación de 2017.
Las condiciones bajo las que operará el esquema de comercialización durante el presente año permitirán ampliar la cobertura de atención para beneficiar a 3 mil productores más que en 2015, señala el comunicado.
Asimismo, para garantizar el resguardo de la leguminosa adquirida por las empresas participantes en dicho esquema, estas recibirán un incentivo de 600 pesos por tonelada.
Ese monto servirá para cubrir gastos iniciales de almacenamiento, operativos y financieros para la pignoración del frijol en los centros de acopio verificados y acreditados por Aserca, distribuidos en las zonas de producción en el estado.
Este año el escenario posee indicadores favorables para la comercialización de frijol, debido a que no existen inventarios nacionales o internacionales; además, en Zacatecas, Durango y Chihuahua se registrará una cosecha corta.
Además, Estados Unidos sembró una superficie menor reduciendo así su oferta en 300 mil toneladas con relación al año pasado. A esto se le suma la paridad cambiaria y crisis de abasto que enfrenta Brasil, que demanda importación urgente de frijol.
NTX
