El titular de la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder), Juan José Canul Pérez, visitó a Marco Antonio Manrique Cruz, productor de pitahaya de Dzidzantún, quien ha logrado colocar la fruta en mercados de Estados Unidos y Asia.
En el reciente corte, Manrique Cruz cosechó 30 toneladas de esta fruto, y lo vende al mercado local y también exporta; de igual forma, también vendió “esquejes” (vástagos de la cactácea) para sembrar 150 hectáreas en otros ejidos de la zona.
Por su parte, el funcionario resaltó que la siembra de pitahaya está cobrando importancia por tratarse de una fruta exquisita que demanda el mercado internacional.
Durante el recorrido por las plantaciones, el productor recordó que el impulso que recibió del gobierno consistió en un sistema de riego, en una bodega de almacenamiento y en cajas para almacenar la cosecha.
Manrique Cruz sembró otras 1.5 hectáreas más de tutores vivos de chacá que le servirá para incrementar la extensión de cultivos. Además, preparó la tierra para sembrar calabaza y tomate, con lo que demuestra que la diversificación es una opción viable en esta región de Yucatán.
Al platicar con Canul Pérez, el productor reconoció que los vaivenes del mercado marcan los precios de la fruta. Sin embargo ya buscó la forma de retardar la fruta en la planta al colocar un recubrimiento contra las aves y los insectos. Además, al envolver la fruta en papel y refrigerarla aún puede durar mucho más.
Durante la visita a la zona productiva, estuvo acompañado del director de agricultura de la Seder, Luis Novelo Piña.
