Campeche.- Productores de la región de Dzibalchén, Iturbide y de tres campos menonitas, vendieron alrededor de 10 mil toneladas de maíz a un precio de tres mil 400 pesos la tonelada del blanco y a tres mil 200 pesos el amarillo, señaló Fernando Catzín Aké, representante de los productores soyeros del municipio.
Subrayó que el maíz poco a poco está siendo desplazado por la producción de soya, debido a que es más redituable, y la gran mayoría de los maiceros le han apostado a su siembra, puesto que su inversión por cada hectárea es de alrededor de cuatro mil pesos, cuando por una de maíz está en casi ocho mil pesos.
Además, dijo que la soya tiene buen mercado, se vende bien y el año pasado el precio de la tonelada fue de entre siete mil y siete mil 300 pesos, cuando la de maíz blanco se está comercializando en apenas tres mil 400 pesos, y el amarillo 200 pesos menos.
El líder productor señaló que comercializaron arriba de 20 mil toneladas de soya en el 2017, y a la fecha 10 mil toneladas de maíz del ciclo de siembra anterior, por lo que dijo que no se puede perder el ritmo de trabajo entre ambos cultivos.
Sin embargo, Catzín Aké mencionó que seguramente para este año muchos productores de maíz se inclinarán por la soya, porque ya vieron que es más redituable, y su inversión es menor en un 50 por ciento en comparación al maíz.
Destacó que además los productores de soya al vender su producto obtuvieron un subsidio “vivo” por parte de la Sagarpa de 519 pesos por tonelada facturada, y recibieron otro subsidio de 600 pesos por parte de Aserca, por lo que el soyero por cada tonelada vendida y facturada obtuvo un subsidio global de un mil 119 pesos por tonelada, lo cual les genera un ingreso adicional.
