Los “Avozillas”, aguacates cuyo tamaño es hasta cinco veces mayor al promedio de este fruto, han iniciado la invasión de Australia de la mano de su sabor que no pide nada a sus similares pequeños.
Llegaron a este país de Asia Pacífico desde Sudáfrica, de donde son originarios, y hasta ahora los únicos escollos son el pago de regalías que debe hacerse así como la obtención y firma de una licencia para su cultivo.
En las ventas iniciales el producto se termina en no más de dos días, en buena medida porque ya hay compradores que los adquieren con anticipación al precio de 12 dólares australianos cada uno (poco menos de nueve dólares estadounidenses).
En términos de cantidad para consumir, un Avozilla sustituye a dos o tres debido a que su peso promedio es de 1.2 kilogramos, aunque hay ejemplares de hasta 1.8 kilogramos.
Poseen todas las propiedades nutricionales típicas del resto de variedades de aguacate y su sabor, aunque el gusto a mantequilla es más acendrado.
Empero, este aguacate gigante tiene un rendimiento por hectárea mucho menor al de otras variedades, y para su distribución se tienen que empacar a mano y con cuidado en cajas uno por uno, sin ningún tipo de maquinaria.
Los Avozillas llegaron a Australia luego de su exitosa incursión en Europa, donde en los últimos años el consumo ha llegado hasta más de las 240 mil toneladas anuales.