Las condiciones actuales del mercado de alimentos permiten elevar la producción doméstica de semillas oleaginosas en esquema de agricultura por contrato, lo que dará certidumbre a productores y compradores de estas materias primas en las que el país es deficitario.
El titular de la Secretaría de Desarrollo Rural de Jalisco (Seder), Héctor Padilla Gutiérrez, señaló que se han registrado incrementos recientes en el cultivo de ajonjolí y girasol en el campo jalisciense, en esquema de compras anticipadas.
Afirmó que Jalisco tiene potencial para el cultivo de varios productos oleicos.
Citó que hay identificadas 85 mil hectáreas para la siembra de cártamo en la región de la Ciénega de Chapala, zona con tradición en este producto que se siembra en el ciclo de invierno y aprovecha la humedad residual del temporal.
También hizo referencia al impulso que se ha dado al cultivo de canola de parte de la Cámara de Aceites y Proteínas de Jalisco (Capro). “Hay un escenario a favor de incrementar su cultivo y comercialización”, dijo.
Padilla Gutiérrez agregó que además del destino de las oleaginosas para la industria aceitera, actualmente se vislumbra una ventana de oportunidad específica en el nicho de los alimentos gourmet y nutracéuticos en los que se demandan aceites como el de aguacate, chía, cacahuate y ajonjolí, entre otros.
En años recientes, el promedio histórico de la siembra de oleaginosas en Jalisco ha sido del orden de cinco mil 800 hectáreas, incluyendo cártamo, ajonjolí, canola y girasol. Durante 2014 se disparó la superficie por el incremento en cobertura que tuvieron el cártamo (siete mil 800 hectáreas) y el girasol (mil 400 hectáreas).
Algunos productos oleicos tienen gran demanda, además de la industria agroalimentaria, en los sectores farmacéutico y cosmetológico.
Otro producto jalisciense en desarrollo es el aceite de orégano silvestre que se recolecta en el Norte de Jalisco.
La Red Nacional de Desarrollo Sustentable ha promovido varios proyectos de agroindustrias que elaboran productos oleicos, como una empacadora de orégano en Mezquitic y una procesadora de aceite de chía en Cuquío.
NTX