CHETUMAL, Q. Roo.- Finalmente, después de meses de sequía, caen algunas lluvias aisladas sobre el sur de la entidad, pero es insuficiente y ya muy tarde. Productores claman por la activación del seguro catastrófico sobre el cultivo de maíz de autoconsumo. Cerca de dos mil hectáreas de caña fueron declaradas pérdida total y el consorcio chiclero confirmó que en este año no podrán tener cosecha alguna.
Otros cultivos, de calabaza chihua, cítricos, hortalizas, frijol, chile y muchos otros, también mostrarían claras señales del estrago causado por el inclemente calor, en tanto que ganaderos deben ingeniárselas para llevarles agua a sus reses, que pierden peso día tras día por la ausencia de pasto que aprovechar.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, más de la mitad del territorio quintanarroense atraviesa una temporada “anormalmente seca”, principalmente en los municipios de Bacalar, Felipe Carrillo Puerto, José María Morelos, Tulum y parte de Lázaro Cárdenas, lo que implica la activación de sistemas de control voluntarios de agua, una medida que entraría en vigor un par de meses después.
Sin embargo, la cosecha seca estaría llegando a su fin; unas semanas después el sur de la entidad recibiría la mayor lluvia en su historia.
Sipse
