El director general de Almacenes, Servicios y Transporte Extraordinarios a Comunidades Agropecuarias del Estado de Michoacán, Rubén Medina Niño, invitó a los agricultores michoacanos a organizarse para asegurar la producción de granos como maíz, sorgo y trigo.
Recordó que Michoacán tiene un liderazgo importante en la producción agrícola, especialmente en los granos. Sin embargo, los productores tienen más dificultades al momento de la cosecha, porque los precios bajan, “se desploman de manera importante”.
Por ello, Medina Niño urgió a instrumentar mecanismos para apoyar a los productores mediante cobertura de precios, “de tal manera que cuando se siembra se tiene la posibilidad de saber a qué precio es que va a vender sus cosechas”.
De acuerdo con el funcionario estatal, la intención de que los campesinos conformen una sociedad es que sumen sus cosechas y logren la producción suficiente para asegurar la venta de sus cultivos, ya que uno de los requisitos para la cobertura es que sea una producción por más de cien toneladas de granos.
“Lo ideal es asociarse con otros productores a través de figuras reconocidas jurídicamente y que son conocidas en el medio rural como organizaciones de producción que contribuyen al darles acompañamiento para la gestión de los recursos y apoyos a través de semillas e insumos, y en este caso el seguro de cultivos”, afirmó.
Recordó que el seguro de cultivos tiene más de seis años operando bajo este esquema en el Estado; además ha apoyado a los productores en la compra del maíz, sorgo y trigo. “Se ha venido trabajando en este sentido tanto en la parte del ciclo agrícola y la comercialización, propiamente, cuando se viene la cosecha”.
El director de ASTECA destacó que con esta medida protegen el precio del grano al momento de venderlo, con lo que socorren a los productores ante los especuladores que pretenden comprar los granos más baratos cuando el precio en la bolsa comercial de Chicago, Estados Unidos, es otro.
Con esto garantizan un precio justo, evitan pérdidas y, además, cuidan el grano, porque el Estado también los apoya con el almacenaje, a través de ocho espacios en el interior. “Nosotros, como paraestatal, tenemos una vinculación entre el productor y el consumidor final”.
Resaltó que existen comercializadores con quienes también pueden trabajar, siempre y cuando estén certificados por la dependencia, “porque ellos luego se encargan de preparar para entregarlo a la industria o al consumidor final”.
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