Durango.- Aproximadamente un 85 por ciento se ha sembrado con semilla de frijol en una superficie que ronda las 18 mil hectáreas en el municipio de Guadalupe Victoria, por lo que se espera que en los próximos días, si no se cumple la meta de las 25 mil hectáreas, el resto podría cultivarse con productos como la avena y la cebada, esto conforme a lo informado por la Dirección de Desarrollo Rural del Ayuntamiento.
Al abundar sobre el particular, el titular de la mencionada dependencia, Ramón Hernández Cisneros, reconoció que en este municipio sí se percibió la falta de semilla de frijol con relación a la demanda de los campesinos de la región, aunque se mostró optimista al indicar que en los siguientes días se podría conseguir este insumo para completar la meta prevista en el actual ciclo agrícola primavera-verano.
Dentro de este contexto, destacó, sin embargo, que, técnicamente, para este 5 o 6 de agosto se vence el plazo para la siembra de frijol. No obstante, subrayó que después de esa fecha los productores podrían cultivar en sus parcelas semilla de avena o cebada, de acuerdo con la disponibilidad de dichos granos.
Asimismo, precisó que correspondería a las autoridades de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) otorgar los apoyos correspondientes para la siembra de avena y cebada, en aquellos casos de campesinos que no pudieron acceder a la semilla de frijol a través de los distintos programas o por su propia cuenta.
Con relación a las lluvias que se han registrado en Guadalupe Victoria, Hernández Cisneros puntualizó que este ha sido un factor muy benéfico para este municipio, ya que se puede constatar cómo las precipitaciones se han generalizado, al grado de que en las diversas comunidades rurales donde se siembran diferentes productos las tierras ya están “al cien por ciento mojadas”.
Indicó que en días pasados todavía se podían observar algunas franjas agrícolas en las que no habían caído lluvias; no obstante, mencionó que recientemente esas zonas ya han sido favorecidas por este fenómeno natural, por lo que se puede afirmar que la región donde se siembra no tiene problemas en ese aspecto.
Donde se generaron algunos inconvenientes por los fuertes aguaceros, dijo, fue en el ejido J. Guadalupe Rodríguez, lugar donde las lluvias arrasaron con una superficie de 50 hectáreas sembrada de frijol, de ahí que se sugirió a los comisariados ejidales que levantaran una lista de los campesinos afectados para solicitar apoyo a la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (SAGDR) del Gobierno Estatal, con la finalidad de que se les contemple en el seguro catastrófico.
El Siglo de Durango
