Chihuahua.- En el municipio de Madera se estableció una plantación de pino ayacahuite de Navidad con la que se busca la producción de 156 mil 200 árboles.
En total fueron 71 hectáreas de terreno en las que durante el presente año se hizo la plantación que fue beneficiada con el programa Plantaciones Forestales Comerciales 2016 de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) en Chihuahua.
El tiempo de cultivo se estima sea de entre cuatro y cinco años durante el cual se les da mantenimiento y cuidados para que alcancen la altura necesaria para su comercialización.
En México para la temporada 2017 productores de todo el país estiman la comercialización de 700 mil árboles de Navidad naturales producidos en México, lo que podría dejar una derrama de alrededor de 350 millones de pesos.
De acuerdo con la Comisión Nacional Forestal de los 848 productores registrados en México, 155 tendrán la posibilidad de comercializar sus árboles por tener la edad y talla adecuada.
De las 11 mil 335 hectáreas de plantaciones de árboles de Navidad en el país, 5 mil 127 ubicadas en 86 municipios de 19 entidades, han sido apoyadas por la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) de 2002 a la fecha.
Los principales productores son Estado de México, Guanajuato, Puebla, Michoacán, Veracruz, Tlaxcala y Cuidad de México.
La CONAFOR informó que en el país se utilizan al menos siete especies distintas para ofrecerlas como árboles de Navidad siendo las más comunes los abetos (Pseudotsuga menziesii) y los pinos blancos (Pinus ayacahuite).
Según cifras reportadas por los productores, este año los árboles mexicanos tendrán costos que van de los 250 a los mil pesos dependiendo la especie, la talla y el lugar donde se compre.
Con la producción nacional se desalienta la extracción clandestina de árboles pequeños y se recuperan terrenos deforestados creando nuevos bosques cuyo manejo sustentable aporta servicios ambientales.
En el aspecto económico, al ser un cultivo permanente, activa la economía en zonas forestales con la generación de empleo con mano de obra calificada.
Al final de la vida útil los árboles se pueden reciclar para la elaboración de composta, por lo que el carbono capturado en ellos no se pierde ni se emite a la atmósfera, de ahí la importancia de llevarlos a los centros de acopio.
En México, las especies más comunes de árboles de navidad son:
· Pinus ayacahuite (pino blanco o pino vikingo)
· Pseudotsuga menziesii (pinabete)
· Pinus greggii (pino prieto).
· Pinus cembroides (pino piñonero).
· Abies religiosa (oyamel)
· Picea sp. (picea)
· Cupressus lindleyii (cedro blanco)
· Otros: Chamaecyparis (Ciprés de Lawson), Thuja (tuyas).
Beneficios ambientales de las plantaciones de árboles de Navidad:
· Las plantaciones se establecen en terrenos sin cobertura forestal o de reconversión productiva (de usos agropecuarios a forestal).
· Las superficies que se han incorporado a la producción de árboles de navidad se mantienen como cobertura forestal, resultando una actividad sustentable.
· Desalientan la extracción clandestina de árboles pequeños de los bosques naturales.
· Generan servicios ambientales.
· Se reciclan para producir abono orgánico o sustrato para producir más árboles. No contamina.
· La producción de árboles de navidad artificiales consume gran cantidad de recursos naturales (renovables y no renovables) y genera contaminación atmosférica. En comparación, el cultivo de los árboles de navidad naturales, tiene menor impacto en el ambiente.