Mesoamérica cuenta con la mayor variabilidad genética del género Phaseolus, y en la región occidente de México se dio la domesticación del frijol común (Phaseolus vulgaris L.)
En México el frijol es considerado una leguminosa estratégica, pues cumple diferentes funciones tanto de carácter alimentario como para el desarrollo socio económico de sus habitantes y la forma cultivada de frijol común se siembra en todos los estados del país y representa más del 95 por cientodel frijol que se consume en México.
Por otra parte, la importancia nutricional del frijol en la dieta de los mexicanos y porque los productores demandan tecnología y semilla mejorada de variedades de frijol por la que tienen preferencia tanto consumidores como agroindustriales, el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) desarrolló, recientemente, cinco variedades mejoradas: Pinto Saltillo; Flor de Mayo Eugenia; Flor de Junio León; Azufrado Higuera y el Negros Jamapa
Cabe resaltar que el INIFAP aporta 85.8 por ciento de las variedades de frijol que se siembran en nuestro país que, acompañadas de innovaciones tecnológicas con métodos de siembra, así como prácticas de conservación de suelo y agua, han contribuido a la producción sustentable de frijol en nuestro país.
La producción nacional de Semilla Certificada de Frijol en el ciclo agrícola O-I 2018-2019 fue de 24,178.50 toneladas.
Gracias a la generación de variedades mejoradas de frijol no sólo se garantiza un alto rendimiento en la producción y una mejor calidad de grano, sino que permite ofrecerlo a un mejor precio elevando la calidad de vida de nuestros productores y de la población en general.
