En una montaña del archipiélago de Sbvalbard, en Noruega, se encuentra una construcción que preservará una de las mayores fuentes de vida en la tierra; el Banco Munidal de Semillas Svalbard; una bóveda subterránea diseñada para almacenar semillas de todo tipo de plantas de cultivo alrededor del mundo.
Según el artículo del portal muy interesante, es también conocida como “La cámara del juicio final”, y aguarda alrededor de 825 mil diferentes tipos de semilla.
En caso de una catástrofe global, este almacén podría ser la única forma de salvar a la humanidad. “Todas las semillas que se pueden encontrar en este depósito son especies sobrevivientes, son las que nuestros ancestros consideraron que valía la pena preservar.” Declaró el agricultor Cary Fowler, quien diseñó la bóveda.
El almacén de semillas más grande del planeta, construido en 2008, se encuentra a 120 metros de profundidad. Es resistente a la actividad volcánica, los terremotos, la radiación y las inundaciones, en caso de que incremente el nivel del mar.
Si llegara a fallar la electricidad, el gélido frío del hielo perenne servirá de refrigeración natural, conservando las semillas durante siglos.
A través de la historia, la popularidad y el uso de ciertas cosechas han ido cambiando, por lo que existían periodos en los que algunos alimentos eran abundantes mientras que otros han desaparecido. Por ejemplo, el 86% de las variedades de manzana en Estados Unidos ha desaparecido, según registros históricos.
Así como en los animales, existen diferentes variedades de semilla dentro de una misma especie. El trigo usado para hacer pan hoy en día es distinto al que se utilizaba hace veinte años, por ejemplo.
La producción en masa dentro de la agricultura ha provocado una homogeneización de los alimentos.
Fowler estableció que preservar la diversidad de los alimentos es la manera más efectiva y barata de ayudar a que la agricultura se adapte a los cambios por los que ha atravesado.
El calentamiento global y el cambio de patrones en el clima están afectando a la producción de alimentos, por lo que las plantas salvajes y las cosechas se han visto obligadas a modificarse para poder sobrevivir.
En caso de que un desastre climático o nuclear azotara la tierra, la cámara Svalbard cuenta con suficientes semillas para replantar en todo el mundo y recuperar las cosechas.
En el video a continuación podrás observar la enorme bóveda de semillas en Svalbard
https://www.youtube.com/watch?v=gFAcyJxIguA