La directora de la UAQ, Teresa García Gasca, detalló que el proyecto se lleva a cabo en colaboración con otras instituciones y centros de investigación, con el objetivo de extraer glicoproteínas llamadas lectinas de frijol tépari y disminuir la incidencia de tumores tempranos en el tratamiento de cáncer de colon.
Explicó que desde 1998 se hacen estudios relacionados con los efectos de la lectina en el tratamiento de dicha enfermedad, pero una sola dosis de ésta requeriría alrededor de 20 kilos de frijol tépari y sumado a esto, el proceso de purificación de la proteína es costoso y con bajo rendimiento.
Señaló que para solucionar ese problema, la propuesta consiste en la construcción genética de la proteína; la producción de ésta a través de una bacteria denominada agrobacterium; luego, la transfección de una planta de frijol sisgénica, y posteriormente, la purificación, caracterización y prueba de los resultados.
García Gasca comentó que debido a que dicha bacteria produce la proteína, pero no adhiere los carbohidratos necesarios, se trabaja en la producción de una planta sisgénica, es decir, modificada genéticamente con los mismos genotipos de otra, para que secrete la glicoproteína en su raíz, gracias a la acción de un péptido señal.
Estableció que ya se generó la planta, pero aún no se tienen los resultados esperados, por lo que la iniciativa será conducida posteriormente por un estudiante de doctorado del Instituto Tecnológico de Roque, en Guanajuato, para la caracterización molecular.
Concluyó que de lograrse el resultado, se va a tener un sistema de producción independiente del frijol que va a permitir generarla en grandes cantidades y por consiguiente, introducido en el mercado como producto farmacéutico que ayude en el tratamiento del cáncer de colon.