Un total 20 mil hectáreas destinadas a cultivos tradicionales, principalmente frijol, entraron a un esquema de agricultura por contrato con Grupo Modelo, para la producción de cebada.
El presidente estatal del Consejo del Sistema-Producto Cebada, Gerardo Jáquez Caldera, informó que, de haber un buen temporal, como hasta ahora, el rendimiento estimado es de 2 toneladas por hectárea.
Al tratarse de agricultura por contrato, el precio pactado con la compañía cervecera es de 4 mil pesos por tonelada de cebada.
“El contrato de compra-venta todo ya está listo”, confirmó, toda vez que los productores contemplan un rendimiento seguro para este ciclo agrícola.
De esta forma, se verán beneficiados aproximadamente mil productores, ya que cada uno tiene, en promedio, 20 hectáreas, sostuvo.
Los cultivos corresponden a la zona de alta productividad de Río Grande, lo que incluye municipios como Sombrerete, Miguel Auza, Juan Aldama y Chalchihuites.
“Trae mayores beneficios, se rompe el ciclo de plagas del frijol, se le quita también presión (…) traemos también ahí problemas con la comercialización del frijol y así se benefician porque ya tienen un precio convenido”, expuso Jáquez Caldera.
Este convenio se da como parte de las acciones de reconversión productiva que pretende bajarle la presión al precio del frijol y es por ello que se están realizando estas acciones, ya que se beneficiarán a mil productores.
La reconversión trae muchos beneficios para el campo zacatecano, ya que se reacomodan los ciclos productivos de la tierra en general.
Asimismo se tiene un convenio con una empresa proveedora de cebada que tendrá un precio de 8 mil pesos por tonelada para siembra.
Para ello, se entregará a las dependencias correspondientes la acreditación de que se cuenta con los predios correspondientes para recibir este apoyo.
Serán alrededor de 100 por hectárea para siembra lo que se dará de este producto a partir de noviembre que haya transcurrido el ciclo agrícola en el estado.
En el distrito de la presa del Chique, en la de Moraleños, dado la presión que baja del agua y en el canal de salida de la misma, los productores no necesitarán energía para hacer llegar el agua a sus cultivos.
Esto, logará un beneficio adicional a los productores, ya que no deberán pagar el uso de la luz eléctrica para el riego.
Estas obras permitirán la diversificación de productos en el campo, porque se hará un mejor aprovechamiento del agua, destacó de León Mojarro.