Desarrollan tecnología contra plagas del cultivo de guanábana

0

México es el principal productor de guanábana en el mundo, con 19 mil 841 toneladas de este fruto en 2013, de acuerdo con información de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).

Sin embargo, la presencia de plagas en el cultivo puede dañar más de 50 por ciento en una producción e infestar hasta la mitad de las semillas en cada fruto, de acuerdo con el investigador Luis Martín Hernández Fuentes.

Para contrastar este problema, desde 2008 el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), a través del Campo Experimental Santiago Ixcuintla, ubicado en el estado de Nayarit, ha realizado estudios enfocados a temas fitosanitarios para el cultivo de la guanábana. En ese mismo año elaboró y ejecutó un proyecto financiado por la Fundación Produce Nayarit para determinar las principales plagas y su adecuado control en cultivos de este fruto.

De lo anterior, los investigadores de esa instancia y los expertos en protección vegetal Hernández Fuentes y Rafael Gómez Jaimes estudiaron y generaron información sobre la avispa barrenadora, principal plaga que ataca al cultivo.

Con base en ello, se realizaron estudios sobre su biología y se determinó su ciclo de vida, comportamiento, alimentación y reproducción, así como los daños y momentos más susceptibles de los frutos.

Luis Hernández explicó que esa avispa deposita sus huevos en los frutos cuando están pequeños; dentro de la semilla el insecto se alimenta y pasa gran parte de su ciclo de vida. Cuando el fruto está próximo a la cosecha, el estado adulto de la avispa emerge y deja una perforación de aproximadamente dos milímetros, que sirve de entrada para otros microorganismos, principalmente insectos y hongos que descomponen las guanábanas.

De esta forma, comentó el investigador, los frutos dañados caen del árbol antes de la cosecha o sufren pudriciones después de ésta. Cuando la guanábana madura, se extrae la pulpa y en ocasiones ésta se contamina con restos de los microorganismos, que demeritan su calidad y merman la producción.

Con esta información, los especialistas evaluaron alternativas de control de esta plaga a través del uso de barreras físicas (embolsado de frutos), trampas, productos repelentes, recolección y destrucción de frutos afectados.

Hernández Fuentes, quien es doctor en entomología agrícola, detalló que los métodos que mayor control brindaron fueron el embolsado de los frutos con malla antiáfidos en la etapa más susceptible de éstos –cuando presenta un crecimiento de tres a siete centímetros de diámetro– así como la aplicación de repelentes a base de ajo y la destrucción de guanábanas afectadas.

El también miembro de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC) señaló que una vez que el insecto ha penetrado al fruto, su control se hace muy difícil y los productos empleados para eliminar hongos y plagas no funcionan.

Sin embargo, con la aplicación de esta tecnología se disminuyen los daños hasta en 98 por ciento y no se afecta el medio ambiente, ya que se aplican productos de bajo efecto residual y sólo en momentos oportunos, lo que evita gastos innecesarios.

Asimsimo, resaltó que actualmente se realiza la transferencia de esta tecnología a técnicos y productores mediante publicaciones e impartición de cursos y talleres en la región.

“La meta es poder extender la investigación y transferencia de tecnología a otras regiones del país, como Veracruz, Colima, Michoacán y Guerrero, donde comienza a tener importancia el cultivo de la guanábana”, puntualizó.

De acuerdo con el investigador, aún falta colectar, identificar y realizar estudios biológicos de otros insectos importantes que dañan frutos y follaje de ese fruto.

NTR

Comentarios

comentarios

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.