Aún no existe control sobre la plaga de pulgón amarillo que lacera la producción de sorgo en el estado, por lo que los daños y las afectaciones generados no han sido evaluados, reconoció Armando Ortiz Calderón, coordinador de Campañas Fitosanitarias de la Delegación local de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).
Ortiz Calderón precisó que cada día el reporte de superficie cultivada con sorgo y con presencia de pulgón amarillo, insecto que se alimenta de la savia de la planta ocasionando debilitamiento, color amarillo y hojas inferiores secas, va en aumento, lo que muestra que el patógeno se encuentra en fase de dispersión y establecimiento en el estado, luego de arribar probablemente a fines de 2014, procedente de Tamaulipas.
Agregó que las acciones de combate han priorizado el control químico, la capacitación y asesoría para el tratamiento de la superficie perjudicada por el pulgón amarillo y la entrega de 2.2 millones de pesos en recursos federales, radicados en el Fondo de Contingencias Fitosanitarias, mediante el cual se han atendido catorce mil 471 hectáreas entre julio y septiembre.
Asimismo, las zonas con mayor afectación por el insecto se encuentran en el Bajío y la Ciénega de Chapala, entre los que destacan los municipios de Pajacuarán, Los Reyes, Jiquilpan, Puruándiro, Churintzio y Numarán, donde la compactación de las extensiones de sorgo y su elevada presencia facilita el ingreso, dispersión y permanencia del pulgón amarillo.
En la entidad, recordó Armando Ortiz, existen 120 mil hectáreas destinadas a la producción de sorgo, suma de la cual al momento se desconoce la proporción de daños y grado de impacto negativo, ya que será hacia el fin del ciclo agrícola que se conocerá con certeza la superficie dañada y la reducción en el rendimiento del cultivo, si bien en las primeras semanas de octubre se prevé obtener resultados preliminares que permitan la revisión de la estrategia seguida en los últimos cuatro meses.
El pulgón amarillo, que limita el daño ocasionado al sorgo, aunque es posible observar al insecto en otros cultivos, inclusive en maleza perenne en estado de hibernación, como el zacate, no causará el encarecimiento de alimento pecuario y, por consecuencia, de la carne de res, ya que a pesar de que se proyecta una baja en el rendimiento del sorgo en forraje y grano, utilizado en la dieta de ganado, no se espera un repunte en el precio al consumidor de la carne.
Alrededor de 117 mil toneladas estarían afectadas por el pulgón amarillo, lo que implicaría pérdidas por entre 655 millones 200 mil pesos y 982 millones 800 mil pesos, mencionó Daniel Luis Arriaga Melena, presidente del Sistema Producto Trigo en Michoacán.
Melena Arriaga, quien recordó que los productores de trigo cultivan sorgo y maíz previo al ciclo otoño-invierno, afirmó que el pulgón amarillo ha sido de difícil control, a causa de la falta de precedentes locales, en detrimento del rendimiento proyectado, de nueve toneladas a diez toneladas por hectáreas a siete toneladas a nueve toneladas por hectáreas, lo que implica la pérdida de alrededor de 234 mil toneladas a 351 mil toneladas del grano.
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