San Pedro, Coahuila.- Si sigue disminuyendo la superficie de algodón que cada año se siembra en la región, provocará el colapso de la economía regional, como en San Pedro, pues su vocación está basada en la producción algodonera, dijo el dirigente de la CNC en el municipio, Natividad Navarro Morales.
En los últimos años, el precio no les favorece y los insumos son muy costosos.
“Nosotros, los que sembramos algodón, hemos aguantado dos años muy difíciles y si hemos aguantado es porque no queremos colapsar la región, y seguimos apostándole al algodón”.
Este cultivo, agregó, permanece casi todo el año y genera una importante derrama económica por los jornales que origina, pues con la pizca manual son unos 200, mientras que con la mecánica son 80 ó 120.
Explicó que para la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el cultivo del algodón sigue siendo el cultivo rector, porque sobre la siembra de ese producto están basados los períodos de riego, sin embargo, cada año disminuye la superficie a sembrar, por lo que no falta mucho para que se cambie la rectoría de los cultivos.
“Con el riego de presiembra son 75 días para el primer auxilio y luego 22 y 23 días, entre auxilio y auxilio, y los forrajes no aguantan tanto el período de 75 días, se tiene que retrasar 15 ó 10 días porque son cultivos muy rápidos, y apenas vas a dar el primer auxilio cuando ya tienen sed… entonces si se siembra más superficie del forraje y no motivamos el cultivo del algodón, se va a ir cambiando de cultivo rector para poder establecer los períodos de riego en base al forraje”, subrayó.
Insistió en que se tiene que buscar los mecanismos para preservar el cultivo del algodón y mantener una estabilidad en la economía local y en la cadena productiva, ya que muchos productores están empezando a saturar otros cultivos y eso provoca una sobreproducción y caída de los precios.
Cultivos
Productores “luchan” por mantener cultivos de algodón.
- Buscan evitar un colapso en la economía, sobre todo en San Pedro.
- El precio no les favorece y los insumos son costosos.
El Siglo de Torreón
