Durango.- Poanas, Peñón Blanco y Cuencamé son los municipios más afectados en la agricultura con parcelas inundadas o dañadas por granizo, principalmente siembras de frijol.
Carlos Matuk López de Nava, dirigente estatal de la Confederación Nacional Campesina (CNC), dijo que ya se tienen contabilizados algunos daños en parcelas por efectos climáticos, es decir, por lluvias en exceso o por granizadas.
En el municipio de Peñón Blanco se tienen contabilizadas alrededor de 300 hectáreas de frijol con daños por la inundación de parcelas; en Poanas, por la zona de la Cieneguilla, se tiene un estimado de 250 hectáreas, aunque en esta zona son alrededor de 15 hectáreas de maíz.
Otro de los municipios que se han visto afectados por estos fenómenos climáticos es Cuencamé, donde el comisariado ejidal reportó mil 500 hectáreas impactadas por una granizada.
Pero se siguen contabilizando hectáreas inundadas, sobre todo a la ribera de ríos y arroyos en varios municipios.
Incluso, algunos comisariados ejidales, sobre todo el de Cuauhtémoc, al sur de Cuencamé, han solicitado que se reactive el seguro catastrófico para los afectados por este clima.
Sin embargo, el mismo Matuk López de Nava aclara que activar en este momento el seguro catastrófico no sería benéfico porque el día en que se activa se contabilizan en ese tiempo las hectáreas dañadas y si más adelante se presenta una situación de emergencia que afecte a un mayor número de hectáreas, estas ya no entran en el seguro catastrófico porque se activó antes de tiempo.
Explicó que el seguro catastrófico se activa cuando el daño en la agricultura es muy elevado, “para que valga la pena lo que se paga por el mismo”, comentó el funcionario, quien reiteró que el seguro se activa una sola vez en toda la temporada y solo se contabilizan las hectáreas afectadas en ese momento.
Por otro lado, señaló que prácticamente ya con el cierre de siembras se pueden contabilizar aproximadamente entre 180 y 190 mil hectáreas de frijol sembradas, es decir, una cifra más baja de las 220 mil que se venían cultivando anualmente.
Pero gracias a la reconversión productiva y a que no se alcanzó a sembrar mucho frijol se logró la siembra de 150 mil hectáreas de avena.
Cifras
Son al menos tres municipios donde ya están contabilizados los daños de hectáreas dañadas por exceso de agua o por granizadas.
Faltan
Siguen sumándose hectáreas de siembras dañadas por exceso de agua sin contar aún las afectadas en el municipio de Poanas.
El Siglo de Durango
