La mosca soldado (Hermetia illucens), es considerada por la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), como una alternativa para la alimentación acuícola por sus propiedades nutricionales.
Se desarrolló una planta piloto para su producción en convenio con la empresa México-holandesa Proento.
“En la naturaleza es común que los peces coman insectos acuáticos. No obstante, dentro de la universidad había estudiantes interesados en trabajar con otras especies como el grillo (Tettigoniidae) o el chapulín (orden Orthoptera), para obtener fuentes de harinas. Encontramos algunos estudios en Colombia y otros en Europa donde están utilizando la mosca soldado sola. Su larva es muy grande, tiene propiedades como ácidos grasos y una buena cantidad de proteína”.
La planta piloto actualmente tiene capacidad para producir 20 kg de larva de mosca a la semana, aunque proyectan aumentar a 100 kg.
En esta etapa experimental los investigadores siguen analizando mejorar las propiedades nutricionales agregando microalgas para que el alimento quede balanceado.
La mosca soldado es alimentada con residuos provenientes de los invernaderos del campus, generando así un reciclaje de nutrientes.
“Buscamos opciones para alimentar a los peces, no porque los ya existentes sean malos sino porque tienen una cadena de valor muy cara. En el costo de producción de un kilo de pez, 60 por ciento proviene del alimento”, dijo García Trejo.
