Productores de la zona norte de la entidad denuncian la presencia de los primeros brotes de la plaga “Pulgón Amarillo” en los cultivos de sorgo, fenómeno que de no frenase la producción de este grano se vería afectada en cuanto a sus rendimientos por hectárea.
Esta situación ya puso en alerta a los agricultores de aquella región, pues se podría en riesgo la mayor parte de los sembradíos en un corto tiempo.
Integrantes de la Unión Regional Agrícola del Norte, donde se encuentra al frente, Agustín Hernández Cardona, se dijo que por el momento son mínimos los daños que se observan, por ello se requiera una pronta liberación de los insectos beneficios llamados Crisopa, sobre todo en los lugares dañados por esta plaga.
Por lo pronto ya se les recomienda a los agricultores la destrucción inmediata de las plantas “hospederas”, pues con esta acción se impide la proliferación de la plaga.
Cabe aclarar que después de tres semanas de haber aplicado la semilla de sorgo, se desvanecen los efectos del insecticida que protege a la semilla, quedando la planta vulnerable ante la plaga del “Pulgón amarillo”.
Por ello es importante realizar constantes revisiones en los sembradíos, lo anterior con el propósito de detectar a tiempo la presencia de esta problemática.
Como dato; esta plaga; el Pulgón Amarillo (Melanaphis sacchari), es originario de África y del Medio Oriente, fue registrado en EE.UU. en los años 70, donde inicialmente se comportaba como plaga en la caña.
El insecto puede infestar al sorgo inmediatamente después de la emergencia de las plántulas o después de 2 ó 3 semanas; sin embargo, las infestaciones más importantes ocurren durante las etapas de crecimiento de cultivo.
Hasta ahora las acciones principales llevadas a cabo han consistido en: capacitación a técnicos y productores, divulgación mediante trípticos, carteles y spots en radio, destrucción de socas y liberación de insectos benéficos. Al norte del estado, los productores ya han liberado las crisopas en la mayor parte de las siembras de sorgo.
El Mercurio
