México “disfruta” de una excelente cosecha de maíz y se espera que su producción de cereales aumente en un 7.0 por ciento en relación con la cosecha récord de 2013, informó la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
En el informe “Perspectivas de cosechas y situación alimentaria”, publicada este jueves, la FAO señaló que la buena cosecha de maíz en México puede aliviar el déficit de producción esperada en América Central.
Recordó que en esa región una sequía a principios de año redujo la producción de maíz en alrededor del 9.0 por ciento, con el resultado de 400 mil familias en Honduras, El Salvador y Guatemala necesitadas de ayuda alimentaria.
El informe dijo que pese a que la producción mundial de cereales alcanzará un récord histórico en 2014, con más de dos mil 500 millones de toneladas, la inseguridad alimentaria empeora en varios países a causa de conflictos, aspectos climáticos y el virus del ébola.
Precisó que la producción de cereales de este año debe llegar a dos mil 532 millones de toneladas, lo que supone un 0.3 por ciento más que en 2013.
Dijo que la producción se ha visto impulsada por las condiciones favorables en Europa y una cosecha récord de maíz en Estados Unidos.
De acuerdo con el informe, la cosecha mundial récord de cereales en 2014 superará la utilización prevista en 2014/2015.
Ello -añadió- permitirá que las existencias alcancen su nivel más alto desde el año 2000 y empujen la relación mundial entre existencias y utilización -una medida representativa de las condiciones de oferta- hasta el 25.2 por ciento, su nivel más alto en 13 años.
Sin embargo, el informe advirtió que 38 países se encuentran en riesgo de inseguridad alimentaria, incluyendo 29 en África, debido a los conflictos civiles, la meteorología adversa y el brote de la enfermedad del ébola.
Precisó que el ébola ha tenido un enorme impacto en los sectores agrícola y alimentario en África occidental, ya que comenzó a propagarse en el momento de la siembra y se extendió a lo largo del ciclo de cultivo, sobre todo en Guinea, Liberia y Sierra Leona.
La FAO alertó que los precios locales del arroz y de la yuca -el segundo alimento básico de la región-, experimentaron aumentos notables en Freetown y otras ciudades en septiembre.
Indicó que la meteorología adversa en la región del Sahel se espera que dé lugar también a una fuerte reducción de las cosechas: hasta en un 38 por ciento por debajo de la media en Senegal.
También dijo que la situación en Siria es especialmente urgente, ya que una cosecha escasa está agravando la tensión debida al empeoramiento del conflicto civil.
Se estima que unos 6.8 millones de personas -en parte refugiados en países vecinos- se enfrentan a una grave inseguridad alimentaria.
La FAO señaló una disminución notable de la producción de la cosecha de 2014, debido al abandono de las tierras, la escasez de mano de obra, los daños en centrales de energía y conducciones para el riego, así como las condiciones de sequía.
Dijo que la situación en Irak también es sumamente grave, ya que el número de personas desplazadas debido al conflicto civil se ha triplicado desde el año pasado y alcanza ya los 2.8 millones.
Asimismo, un tercio de la población de la República Centroafricana (RCA) necesita ayuda alimentaria urgente, ya que se estima que la producción de alimentos de este año estará un 58 por ciento por debajo del promedio, a pesar de la mejora en 2013.
La FAO señaló un aumento en la violencia desde principios de octubre en un país donde uno de cada cuatro hogares ha recurrido a estrategias de supervivencia negativas, incluyendo la venta de los activos productivos y el sacrificio del ganado.
La llegada de refugiados -en especial de la región de Darfur, en Sudán, el norte de Nigeria, la República Centroafricana y Malí- ha supuesto mayor presión sobre los suministros locales de alimentos, especialmente en el Chad, donde más de 550 mil personas necesitan ayuda alimentaria y para los medios de subsistencia.
De acuerdo con el informe, en otras partes de África las condiciones son mejores, sobre todo en África austral, donde los precios estables del maíz disminuyeron debido a la abundante oferta tras la producción excelente de este año que impulsó la seguridad alimentaria.
NTX
