Aunque este año el Permiso Único de Siembra significó un avance importante en términos de la planeación en el campo, este concepto sigue siendo responsabilidad de los productores, que deben apegarse a su plan de cultivos autorizado.
Román Alberto Cepeda, delegado de la Sagarpa en la Región Lagunera, señaló que no se cuenta con la normatividad para obligar a los productores a sembrar cultivos específicos, por lo que la planeación debe darse en función de los ciclos inmediatos anteriores y como va a estar el volumen que se autorice a extraer de la presa para el riego.
“Nosotros esperamos que sea un ciclo regular, no un ciclo restringido, tener mayor superficie, tener un equilibrio en los cultivos, en algodón, el forraje, entre otros productos, y también generar, por parte nuestra, los mecanismos de comercialización adecuados”, manifestó.
Señaló que actualmente se concluye con el ciclo primavera-verano, que es el más importante en la región, y se inicia con el otoño-invierno, que es muy pequeño, además de que se tendrá un nuevo escenario en la Secretaría, en términos de la normatividad.
Recordó que este año se implementó, luego de más de 25 años, el Permiso Único de Siembra, sustentado técnicamente, georreferenciado, que puede compartirse con otras dependencias, pero debe diversificarse con otras dependencias para poder sugerir mejores decisiones.
“Tenemos que concientizar a los productores y las inercias, a quienes habilitan para la siembra, generar alternativas de cultivo”, comentó.
Cepeda dijo que el próximo año se sumarán a esta iniciativa los productores de agua subterránea, ya que en este año fueron solamente los de agua rodada.
