Proyectos de investigación bajo la lupa de agricultores

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Tamaulipas.- El pasado viernes el Campo Experimental de Rio Bravo (CERIB) fue sede de una reunión que congregó a los miembros del Consejo Consultivo de la institución, así como a dirigentes de la Unión Agrícola Regional del Norte de Tamaulipas (UARNT), a los directivos del Patronato para la Investigación, Fomento y Sanidad Vegetal (PIFSV) y al grupo de investigadores que laboran en el Instituto Nacional de Investigaciones, Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP).

El objetivo de la junta fue analizar y sugerir cambios a los 10 proyectos de investigación que se estarán desarrollando en el transcurso del 2016 y que se encuentran bajo convenio con el PIFSV, para ello, cada investigador responsable de operar cada uno de los proyectos se dio a la tarea de explicar cada uno de los planes y programas, a fin de que los productores líderes pudieran recomendar cambios o proponer nuevas líneas de investigación en beneficio de la agricultura regional.

Pulgón amarillo y altos rendimientos

Entre los proyectos de investigación que se dieron a conocer, destacan por sus importancia los siguientes: El relacionado con el pulgón amarillo en sorgo, donde se planteó la necesidad de continuar con las pruebas en el ciclo primavera-verano 2016, ya que es donde se tiene una mayor presencia del insecto. Asimismo, se pidió que se confirmarán los resultados mas sobresalientes que se obtuvieron al cierre del año 2015, particularmente lo que tiene que ver con el uso del insecticida imidacloprid líquido aplicado al suelo y al cierre del cultivo, así como el manejo de híbridos que presentan mayor tolerancia a esta plaga, entre otros aspectos relacionados con la presencia de este insecto en la región norte de Tamaulipas.

Llamó la atención de los asistentes los planteamientos que se hicieron en relación con el proyecto de predios de altos rendimientos, donde el propósito es validar el uso de composta (1.2 toneladas por hectárea), más el uso de fertilizantes químicos (los que indiquen los análisis de suelos), aplicados en diferentes etapas del cultivo y considerando la utilización de micorrizas y un mejorador de suelo. Todo este trabajo encaminado a mejorar la fertilizad de los suelos, y de esta manera, ver la posibilidad de reducir los efectos del clima (exceso de humedad, sequía o falta de agua) y tratar de obtener rendimientos promedio de 4 a 5 toneladas de sorgo en temporal, de 7a 8 toneladas de sorgo en riego y de 8 a 9 toneladas de maíz por hectárea en predios de Río Bravo y Valle Hermoso.

Rotación de cultivos y agricultura de conservación

Destacaron también los argumentos que se esgrimieron sobre los proyectos de rotación de cultivos y agricultura de conservación. En el primer caso, se busca darle continuidad a los trabajos que a la fecha se han realizado, por ejemplo, el uso de maíz y sorgo en predios que previamente fueron sembrados con algodón, canola o soya, y de esta manera, comparar los rendimientos obtenidos contra los que se alcanzan en el monocultivo que prevalece en la región (maíz-descanso-maíz y sorgo-descanso-sorgo). En este sentido, los trabajos de investigación que a la fecha se han realizado, indican que hay un incremento en el rendimiento a la hacer una rotación adecuada de cultivos en un mismo terreno.

En lo que compete al proyecto de agricultura de conservación, la intención es realizar estudios que permitan reducir el número de labores que realizan los agricultores, para ello se trabajará en el uso del subsuelo, manejo de herbicidas y la utilización de cultivos de cobertura. Con esto se pretende aprovechar y conservar mejor la humedad ocasionada por las lluvias, mantener o mejorar la fertilidad del suelo, reducir el paso de la maquinaria, disminuir el consumo de diésel, y aminorar los costos de producción sin reducir los rendimientos.

Resto de los proyectos

El resto de los proyectos que estarán desarrollando los investigadores del CERIB, tienen que ver con: 1) La validación de híbridos varios de maíz, sorgo, frijol y soya; 2) Cultivos de invierno (trigo, cártamo y canola); 3) Pruebas para corregir clorosis férrica en diferentes cultivos (maíz, soya, okra, frijol y algodón); 4) Plagas en maíz con énfasis en diabrótica y araña roja; 5) Uso de agua de riego en maíz, comparando el sistema tradicional por gravedad contra el uso de riego por goteo o a través de cintilla; y 6) Uso de otros cultivos de alternativa validando los genotipos más sobresalientes tanto en riego como en temporal.

Destacable

>El total de los proyectos a financiar por el PIFSV alcanza la suma de 1 millón 375 mil pesos, con erogaciones en cada uno de los cuatro trimestres del año.

>Por su importancia y monto asignado destacan los proyectos relacionados con el pulgón amarillo, rotación de cultivos y validación de híbridos y variedades de soya y frijol.

>Un total de 10 investigadores del INIFAP-CERIB participan en la ejecución de los proyectos.

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