Especialistas de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) realizarán un proyecto que permita evitar la presencia de bacterias en los cultivos de camarón, y con ello garantizar la producción de una de las actividades más importantes de esta entidad.
El doctor Gilberto Gutiérrez Salazar refirió que el proyecto se enmarca en las acciones que realizan los investigadores para evitar la presencia de enfermedades en los cultivos de crustáceos.
“Lo que estamos tratando de hacer es vigilar la producción de camarón y detectar las diferentes enfermedades virales o bacterianas que puedan afectar a los productores, y poder apoyarlos a que mermen menos sus cosechas”, dijo.
Explicó que recientemente, junto con el Instituto Tecnológico de Sonora, estudiaron una bacteria que ha causado problemas en los cultivos de camarón en Sonora, Sinaloa, Nayarit y que recientemente entró a Tamaulipas.
“Dentro de las convocatorias de Conacyt, se sometió un proyecto del Cuerpo Académico para realizar una investigación sobre la bacteria y esperamos una próxima convocatoria para aterrizar el trabajo en el estado”, dijo.
El también miembro del Cuerpo Académico en Ciencia Animal y Agronegocios de la Facultad de Medicina Veterinaria, mencionó que recientemente se concluyó el proyecto denominado “Enfermedades tóxicas y parasitarias en los cultivos de camarón en Tamaulipas”, en donde se detectó una enfermedad tóxica por envenenamiento de benomil.
“Debido al agua de pozo que estaba generando esa granja que situada en una zona de agricultura en Reynosa, también se detectó una amplia prevalencia de protozoarios en este caso de gregarinas en la zona de La Pesca, que también fue importante haberlos descubierto”, destacó.
Recordó que la Facultad de Medicinas Veterinaria inició en 1990 la producción con larvas de camarón en La Pesca, y a partir de ese año Tamaulipas empezó a crecer en cultivos de camarón, “gracias a los esfuerzos de los investigadores de la UAT”.
Actualmente, Tamaulipas cuenta con mil 250 hectáreas de cultivo de camarón distribuidas en zonas como Reynosa, La Pesca y Altamira, zonas en las que se trabaja de manera permanente concluyó.
