La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, a través de la Comisión Nacional de Zonas Áridas (Conaza) y con el apoyo de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM), inició el proyecto de estimulación de lluvias en el estado de Chihuahua, con el fin de mitigar los efectos de la sequía en la agricultura y ganadería.
El programa, que consiste en liberar moléculas de yoduro de plata en las nubes para estimular la precipitación y, de esta manera, ayudar a que las presas y las cuencas reciban el líquido, emplea tecnología amigable con el ambiente, resaltó la dependencia federal.
Se trabajará en dos millones de hectáreas en varias zonas del estado, que incluyen los municipios de Guerrero, Bocoyna, Carichí, Nonoava, Balleza, San Francisco del Oro, Huejotitán y Rosario, las mismas que se cubrieron en 2021, indicó.
El objetivo es recuperar la humedad del suelo para propiciar el crecimiento de alimento para el ganado, la siembra de cultivos de temporal y, de forma colateral, se esperan escurrimientos hacia las presas, con lo cual se beneficiará a un mayor número de productores de las regiones involucradas.
Agricultura resaltó que la FAM aportó al proyecto dos aviones King Air 350i, con capacidad de reacción inmediata para las condiciones de operación que se requieren, además de que se cuenta con pilotos experimentados.
La planeación y programación de este tipo de vuelos se lleva a cabo a partir del análisis de las condiciones técnicas por parte de meteorólogos de ambas dependencias, sustentadas con información obtenida mediante aplicaciones móviles e imágenes satelitales.
En abril pasado, Agricultura puso en marcha el proyecto de estimulación de lluvias para mitigar los efectos del desabasto de agua de la zona metropolitana de Monterrey, Nuevo León, en el distrito de riego DR-025, Bajo Río Bravo, Tamaulipas y se espera continuar en Sinaloa, Baja California, Sonora y la zona de La Laguna.