La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural de Jalisco (Sader), propuso financiar el 50 por ciento del costo de las máquinas cosechadoras a los productores cañeros, para enfrentar el problema de mano de obra que se registra durante su cosecha.
Esta propuesta se formuló en una reunión de trabajo con el Sistema Producto Caña del Estado de Jalisco (SPCEJ), en la que se analizó el contexto actual de este cultivo y se acordó la formalización de un plan de trabajo que responda a las prioridades de rentabilidad y desarrollo sustentable de este producto, en el que el campo jalisciense ocupa el segundo lugar nacional.
Al respecto, el titular de la Sader, Alberto Esquer Gutiérrez, puntualizó que este plan de trabajo se enfocará en tres vertientes: la mecanización del campo cañero y la restauración de sus suelos de cultivo; la revisión permanente de la exportación de azúcar durante la zafra; y el aumento de la superficie de riego en la región cañera de Tamazula.
La propuesta del financiamiento para la compra de la maquinaria para la cosecha de caña supone la modalidad del arrendamiento financiero y plantea la opción de que las máquinas puedan ser adquiridas posteriormente por los cañeros o sus organizaciones.
Estas propuestas de la Sader fueron en respuesta a los problemas planteados por SPCEJ y que formuló su titular, Roberto Ochoa Gutiérrez, dirigente de los cañeros del ingenio de Tala, de la Confederación Nacional de Propietarios Rurales (CNPR) y su homólogo de la Confederación Nacional Campesina (CNC), Serafín Hernández Campos.
La propuesta de la Sader también incluye el problema de acidificación de los suelos agrícolas y su consecuente baja en fertilidad, además de la necesidad de ampliar las zonas de riego donde ya hay presas concluidas, como es el caso del ingenio de Tamazula.
Esquer Gutiérrez precisó que las propuestas de la Sader incidirán sustancialmente en aumentar la competitividad del sector cañero y sus ingenios, particularmente en un escenario donde la fructosa de maíz ha incrementado su presencia en el mercado mexicano de edulcorantes, con el consecuente impacto negativo para la agroindustria azucarera.
El titular de la Sader acudió a Tala para visitar el ingenio José María Martínez, la factoría azucarera más tecnificada del país, que actualmente procesa diariamente 13 mil 500 toneladas de caña de azúcar.
Cada cosechadora supone un costo de ocho millones de pesos; Jalisco es el segundo estado productor de caña, solamente superado por Veracruz.
Existen en la entidad seis ingenios azucareros: ubicados en Tala, Ameca, Bellavista (Acatlán de Juárez), Autlán, Casimiro Castillo y Tamazula; se cultivan 73 mil hectáreas de caña que producen seis millones de toneladas.
Se requieren cinco mil 400 cortadores de caña por periodo de recolección; se tiene un rendimiento de 86 toneladas de caña por hectárea, superior al promedio nacional de 67 toneladas.
La falta de cortadores de caña se debe a la demanda de mano de obra de otros cultivos del campo jalisciense, como berries y aguacate, entre otros.
NTX