Una vez que la acuacultura y las pesquerías de Jalisco han logrado un incremento notable en años recientes, sobre todo con las granjas de tilapia, ahora el reto es ordenar el mercado, dijo el titular de la Secretaría de Desarrollo Rural de Jalisco (Seder), Héctor Padilla Gutiérrez.
En este sentido, comentó tienen el reto de la estructuración de un cluster de la tilapia, como ocurre en otros ámbitos productivos, de modo que se avance en el aprovechamiento de todos los subproductos derivados del pez, como la piel, las escamas, vísceras y el esqueleto.
Dio a conocer que la Seder ya empezó a analizar las acciones que deben darse, como el impulso a empresas procesadoras de los subproductos y uno de esos logros son las plantas fileteadoras que se han establecido en la región Ciénega para aprovechar las vísceras y los huesos.
Al respecto, el técnico del Sistema Producto Tilapia Jalisco, Jesús Arriaga Varela, expresó que dentro de las acciones de fortalecimiento de la cadena productiva del sector pesquero y acuícola, se debe facilitar que las cooperativas den el paso a convertirse en organizaciones que procesen y vendan los subproductos.
Manifestó que el objetivo es que se beneficien con la venta de los pescados y sus derivados, aspecto que ya ha sido considerado por la Seder.
Arriaga Varela también hizo notar que una acción que debe impulsarse es que las curtidurías jaliscienses consideren a la piel de tilapia dentro de su portafolio de productos, como ya se ha hecho en el gremio curtidor de León.
Por su parte, la bióloga de la Seder de la región Ciénega, Xóchitl Rosales Jiménez, informó que se cuenta con 24 plantas fileteadoras ubicadas en los municipios de Jamay, Ocotlán, Tizapán y Tuxcueca, las cuales son de gran importancia pesquera en Jalisco.
También resaltó la importancia de que el personal de estas plantas son mujeres dadas las habilidades que poseen para filetear el producto y colocar en hielo para evitar su deterioro y conservar la calidad.
La generación de empleos oscila en un promedio de cinco a 20 personas por fileteadora dependiendo de la temporada y los volúmenes que fluctúan entre los 100 kilogramos a las dos toneladas, según la capacidad de producción de cada pesquería de la ribera.
El producto es comercializado en el mercado del mar en Guadalajara, también en Michoacán y en el mercado de la Viga del Distrito Federal. Las vísceras y demás desechos de los peces después del fileteado, son recogidos en el camión de la empresa Acuaharianas del Lago, la que procesa y genera subproductos como son: harina de pescado y aceite, que son empleados como insumos para el alimento para mascotas y peces ofreciéndoles un mayor valor nutritivo.
Con los desechos también se elabora composta para mejoramiento de suelos y con ello se logra un mayor aprovechamiento de la masa corporal de estos productos haciendo más eficientes los procesos y dando valor agregado.
Además de que se contribuye a evitar un problema de contaminación. Xóchitl Rosales dijo que como cadena productiva, es un claro ejemplo a seguir dentro del área piscícola.
Jalisco es líder nacional en la producción de tilapia con 26 mil 700 toneladas al cierre de 2014, esta especie es estratégica en las políticas públicas del sector pesquero; entre los productos generados por la industrialización del pescado figuran aceite, pieles, colágeno y harinas, entre otros.
NTX
