En la modernización del sector acuícola y pesquero es de vital relevancia el trabajo legislativo, porque se necesitan cambios precisos en la estructura jurídica para fijar las bases del desarrollo de esta actividad, de la cual dependen más de 270 mil familias.
Así lo subrayó el titular de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca), Mario Aguilar Sánchez, al atender la convocatoria de la Comisión de Pesca y Acuacultura de la Cámara de Senadores, que preside el legislador panista Salvador López Brito.
El funcionario federal reconoció que la visualización que tienen de la pesca nacional los integrantes del Congreso de la Unión es acorde a la importancia que le corresponde al sector, el cual precisa de estrategias diferenciadas acordes a la naturaleza del sector pesquero y acuícola.
Destacó la importancia de las iniciativas presentadas por senadores de diversas fracciones parlamentarias para consolidar el desarrollo de la acuacultura continental y la maricultura.
Ambos rubros representan una de las mayores expectativas de crecimiento en los volúmenes de producción, precisó la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) en un comunicado.
En la reunión, Aguilar Sánchez informó de los programas, avances y acciones específicas de la Conapesca para fomentar la producción y desarrollo sustentable de la pesca y la acuacultura.
Estableció que para el gobierno federal la actividad pesquera nacional constituye un sector estratégico, por lo que se aprovecha al máximo su potencial con la aplicación de las políticas públicas que instrumenta la Sagarpa.
El funcionario adelantó que dentro de esta dinámica de apoyo, se prevé que en el periodo 2012-2018 el volumen de producción acuícola crecerá alrededor de 50 por ciento, al pasar de 254 mil a 390 mil toneladas.
Para ello, dijo, se inició el Programa de Acuacultura en Zonas Áridas y se fomenta una acuacultura rural en zonas marginadas, lo que generará empleos y la producción de alimentos de alta calidad.
Refirió que en el rubro de la maricultura se desarrolla la producción de especies marinas de alto valor comercial y se apoya la cría de huauchinango, robalo y mero.
Lo anterior, remarcó, porque “nuestro país demanda una mayor producción de alimentos de alta calidad proteínica, por lo que este sector tiene una amplia posibilidad de posicionarse como una opción de crecimiento económico y social, que propicie la conformación de polos de desarrollo”.
Dio a conocer que ante la necesidad de contar con áreas de atraque, protección y proceso para mejorar las condiciones de trabajo de los pescadores e incrementar el valor agregado de la producción, se apoya en la construcción de obras en 14 campos pesqueros para beneficio de mil 887 familias de pescadores.
Además en la modernización de la flota pesquera mayor, que a la fecha asciende a mil 90 embarcaciones, y de la menor, que comprende el reemplazo de cinco mil 482 motores fuera de borda, en beneficio de 17 mil 450 pescadores ribereños, concluyó.
NTX
